Es la segunda vez en el año que Román “Chocolatito” González declina en una cartelera de HBO y, curiosamente, ambas han sido contra Pedro Guevara en medio de señalamientos de falta de preparación de calidad. Este domingo diferentes medios internacionales anunciaron que el tetracampeón pinolero no peleará el 8 de diciembre ante el excampeón mexicano en la despedida de HBO por una lesión en su rodilla derecha.
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Posteriormente, el periodista Levi Luna, allegado al equipo de Chocolatito agregó: “El daño en el menisco se visualizó a través de una resonancia magnética realizada en Indio, California. Román tendrá que operarse la rodilla por medio de una artroscopia (consiste en la visualización de una articulación). Su recuperación puede tardar seis semanas y al momento de la primera molestia, González fue llevado de emergencia al hospital, se le trató la rodilla mediante una inyección de cortisona, pero el dolor persistió incluso haciéndolo perder balance sobre el ring. Intentó seguir entrenando por unos días aún con el dolor hasta tomar una decisión definitiva”, concluyó el periodista.
Cambio de preparador
El tetracampeón recientemente nombró a Rafael Rojas como jefe de su preparación física. Antes en la época de Arnulfo Obando había estado Wilmer Hernández, quien demostró ser una garantía, luego al contratar nuevamente a Gustavo Herrera como entrenador se designo a Alfredo Corrales como jefe de la preparación, quien ya había tenido experiencia en el boxeo. Sin embargo para la última pelea el apoderado de González sumó al tico Rojas.
En un trabajo del mismo Levi Luna, Rojas admitió que se especializaba en artes marciales mixtas y muay thai. En ese campamento se alternó con Corrales, pero para este combate se desprendieron de Alfredo y dejaron al especialista en artes marciales mixtas. Ahora desencadenó en una lesión en la rodilla de Chocolatito, la cual se desconoce como ocurrió. Su entrenador Marcos Caballero se limitó a decir que “todo iba bien” y que no podía hablar hasta recibir la autorización del equipo del tetracampeón.
Señalamientos
El 5 de mayo Román González estaba previsto a enfrentarse a Pedro Guevara y realizar su retorno en combinación con Gennady Golovkin, pero Chocolatito no estaba en condiciones de afrontar un combate. “Siempre he dicho que pelearé cuando esté bien entrenado y de nada me sirve pelear por pelear. De marcar la categoría yo lo hago pero de eso no se trata esto”, comentó González al decidir que no pelearía el 5 de mayo.
Posteriormente, al consultarle a su apoderado, Carlos Blandón, sostuvo que Román iba a batallar en esa fecha, pero se sorprendió al indicarle que era el propio boxeador quien había tirado la toalla. Días más tarde se le informó a Tom Loeffler, presidente de 360 Promotions, que por razones de visado y por la crisis del país Román no había podido sacar a tiempo sus papeles.
A un mes sin intensidad
Cuando faltaban 30 días para el 8 de diciembre, Román González apenas se marchaba a Coachella, California a iniciar su campamento. El tiempo que pasó después del 15 de septiembre cuando se enfrentó a Moisés Fuentes hasta su partida a Coachella, entrenaba solo en el Róger Deshon de forma esporádica solamente con su papá, Luis González. Diferentes reportes coincidía en que los entrenamientos duraban entre 30 y 40 minutos de forma “suave”.
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Se pensó que Chocolatito no pelearía el 8 de diciembre por el reflejo de su adiestramiento, pero decidió ir en esa velada, la cual será la despedida de HBO del mundo boxístico, declinando a dos semanas del combate aduciendo una lesión.