Organismos de derechos humanos nacionales e internacionales, junto a asociaciones de prensa, expresaron su repudio ante el hostigamiento, acoso, amenazas, asedio y agresiones físicas que se han incrementado las últimas semanas hacia los periodistas, directores y personal de los medios de comunicación independientes por parte del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
El relator especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Edison Lanza, se expresó con preocupación a través de Twitter sobre la situación del periodismo crítico en Nicaragua.
“La acción directa (agentes estatales) o indirecta (turbas beneficiadas) puestas a hostigar y atacar en forma permanente a periodistas y medios en Nicaragua. Algo pocas veces visto con esta intensidad”, manifestó ayer Lanza.
La accion directa (agentes estatales) o indirecta (turbas beneficiadas) puestas a hostigar y atacar en forma permanente a periodistas y medios en #Nicaragua. Algo pocas veces visto con esta intensidad https://t.co/P4NPu3ihkf
— Edison Lanza (@EdisonLanza) November 26, 2018
Desde que Ortega asumió el gobierno en 2007 impuso la censura a los hombres y mujeres de prensa de medios críticos a las actividades y a la información de las instituciones públicas. Pero desde abril pasado, con el inicio de represión del régimen a las protestas ciudadanas, también más de treinta reporteros y medios han sido agredidos, amenazados o detenidos por turbas y Policía Orteguista (PO).
La represión a las protestas dejan más de quinientos muertos, según organismos de derechos humanos. El periodista Ángel Gahona fue asesinado el 21 de abril, durante el inicio de las protestas que fueron reprimidas; un crimen que sigue impune porque si bien dos jóvenes afrodescendientes fueron condenados, los familiares del reportero y testigos del crimen aseguraron en el juicio que el responsable era un policía.
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La detención del editorialista del diario LA PRENSA, Luis Sánchez Sancho; las amenazas a los directores del canal 100% Noticias, Miguel Mora y su esposa Verónica Chávez; al comentarista Jaime Arellano; el ataque sufrido por Gustavo Jarquín de Radio Corporación, sufridos los últimos días, es parte del recrudecimiento de la represión del régimen hacia el periodismo independiente.
Modelo cubano
Marcos Carmona, secretario general de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), y Gustavo Bermúdez, presidente de la Asociación de Periodistas de Nicaragua (APN), repudiaron que la PO en servidumbre a la pareja dictatorial sea la lanza de las agresiones hacia el periodismo.
Ambos coinciden en que se busca aplicar el modelo cubano, aliado de Ortega, en el cual se silencia a las voces críticas para que el pueblo solo reciba la información que a la dictadura le conviene para mantenerse en el poder.
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“Lo que busca el régimen es amedrentar, mantener un estado de amenaza para silenciar los medios independientes, los pocos críticos que quedan en Nicaragua y lo hacen a través de actos de amenazas, y buscan que la población no sea informada de los hechos reales, porque lo que pretende el régimen es que haya una sola voz y sea la oficial, las mentiras que ellos repiten y que nadie les cree”, afirmó Carmona.
Venganza contra Sánchez
El presidente de la APN, Gustavo Bermúdez, denunció que se está cumplimiento la advertencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), respecto a que la cuarta etapa de represión de la dictadura orteguista sería contra las mujeres y hombres de prensa de medios críticos.
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“En el caso de don Luis Sánchez Sancho (editorialista de LA PRENSA) me parece que es parte de la misma venganza política del régimen. Hay que tomar en cuenta que la voz y pensamiento de don Luis tiene mucha incidencia en la opinión pública, porque es un hombre con convicción inquebrantable de denunciar todas las violaciones de derechos humanos que en once años ha cometido la dictadura de Ortega y Murillo”, afirmó Bermúdez.
Sánchez Sancho, de 76 años, permanece detenido injustamente por la PO desde el sábado.