Nicaragua cerró septiembre con mayor deterioro en la tasa de morosidad en el sistema financiero nacional, superando por primera vez en varios años la media a nivel de Centroamérica, según detalló el Banco Central de Nicaragua (BCN) en su reporte sobre el estado del sector financiero.
La cartera en riesgo escaló a 8 por ciento del total de los saldos clasificados como préstamos por parte del sistema financiero. Esto es superior al 7.1 por ciento contabilizado en agosto, es decir que de un mes a otro hubo un aumento de casi 13 por ciento, equivalente a 0.9 puntos porcentuales.
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Mientras que la cartera vencida en septiembre fue de 2.5 por ciento del total de los préstamos netos y el mes anterior anduvo en 2.3 por ciento, es decir que hubo un incremento de 8.69 por ciento, equivalente a 0.2 puntos.
El informe del BCN admite “que el indicador cartera vencida entre cartera bruta en Nicaragua se ubicó levemente por encima con respecto al promedio de la región Centroamérica y República Dominicana (2.4 por ciento)”.
El documento también detalla que la calidad de la cartera, un 89.5 por ciento se clasificó como cartera “A”, o sea la cartera sana. Durante años este indicador se mantuvo por encima del noventa por ciento.
“En relación a la mora por tipo de crédito, se observó un aumento en todos los rubros en relación al año pasado. Se destaca el sector de tarjeta de crédito cuyo incremento fue de 2.1 puntos porcentuales, pasando de 2 a 4.1 por ciento en relación a septiembre 2017”, según el balance financiero hasta septiembre.
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Entre abril y septiembre, según números de la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif), los créditos prorrogados, reestructurados, vencidos y en cobro judicial se deterioraron con fuerza, lo que explicaría el porqué la cartera en riesgo y vencida acumulada hasta septiembre aumentó significativamente con respecto a abril —antes de que estallara la crisis sociopolítica—.
Este deterioro de la mora en Nicaragua coincide con el aumento del desempleo, como consecuencia de la crisis sociopolítica que ha provocado la destrucción de más de cuatrocientos mil puestos de trabajo. Además la economía se encamina a cerrar con una caída de 4 por ciento.
Crédito sigue mermando
Entre abril y octubre, según números de la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif), la cartera de crédito neta ha pasado de 168,250 millones de córdobas a 151,280 millones de córdobas, es decir 16,970 millones de córdobas menos.
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La reducción de la cartera neta de crédito equivale a más del ciento por ciento de la cartera agrícola (13,972.8 millones de córdobas hasta agosto) y casi cinco veces de la cartera ganadera (3,427.1 millones de córdobas).
Además representa más del ciento por ciento de lo que está entregado en concepto de tarjeta de crédito (11,742.8 millones de córdobas) y el 30 por ciento del crédito comercial, que es el más grande de las principales diez actividades económicas que atiende la banca nacional.