14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Byron Rojas recibe castigo de CP Freshmart. LAPRENSA/TOMADA DE THAIREC

Byron Rojas se enreda en Tailandia con la telaraña de Freshmart

La semilla del coraje no germinó en el inframundo llamado Tailandia y Byron Rojas se volvió a enredar en las garras de Knockout CP Freshmart. El sonido de la derrota es el silencio...

La semilla del coraje no germinó en el inframundo llamado Tailandia y Byron Rojas se volvió a enredar en las garras de Knockout CP Freshmart. El sonido de la derrota es el silencio, el gallito se apretó los dientes y disimuló las lágrimas cuando escuchó el fallo en Chonburi. Los tres jueces habían visto ganador al monarca, no pudieron ser más justos, pero en medio del nudo de la garganta, el esforzado matagalpino sabía que había caído en las telarañas dejadas hace dos años: el mismo rival, las mismas mañas y Rojas con la misma impotencia de no haber desarrollado su boxeo.

Te puede interesar: Byron Rojas se mostró relajado y sin presión en el entrenamiento público

El derrumbe es una pena porque Rojas estudió mejor que nadie a Freshmart, se preparó al límite con su entrenador Wilmer Hernández, pero la mente y el cuerpo no estuvieron en sintonía en el combate. La mente le quedó en blanco como en los exámenes de admisión: el Gallito no pudo entrar nuevamente al pequeño reino de monarcas. Y es que el problema resultó que el joven de La Chispa nunca encontró la llama, se dedicó a realizar lo mismo esperando resultados diferentes y cuando parecía haber encontrado el ritmo en el cuarto asalto se volvió a desafinar.

En el primer asalto las sensaciones eran confusas. El Gallito empezó con jab repetido y buscaba el gancho, Freshmart retrocedía. Ripostó el campeón con dos jabs consecutivos y Rojas se abalanzó a otra vez a los bajos. Sin embargo, iniciaron los amarres. Un asalto muy parejo en el cual el Gallito fue mejor en principio y el tailandés en la recta final. En el segundo regresaron los demonios del pasado. Hubo 10 amarres, Rojas perdía distancia y Freshmart estaba cómoda en la corta, a pesar de la izquierda en cruzado del matagalpino, el campeón dominó en pleno.

En el tercero el tailandés continuó implantando el dominio con su estilo confuso y sucio. Golpeó frecuentemente de forma ilegal los bajos de Rojas, el réferi puertorriqueño Rafael Ramos lo permitía. Ni un llamado de atención al campeón. En el cuarto asalto surgió la esperanza. De repente el retador estaba en la línea de fuego descargando su poderío. Primero fue la izquierda y luego la derecha que retrocedió a Freshmart. Posteriormente surgió otra izquierda seca y un recto que preocupó el defensor del título. Byron se hacía presente, pero fue un falso paraíso en medio del desierto porque en el asalto siguiente perdió el ritmo y entró en la desesperación.

Lea además: Wilmer Hernández, entrenador de Byron Rojas: “Esta será mi graduación”

Cada asalto era una copia del anterior favorable al local con diferencia de una a otra situación destacable. En el séptimo Rojas fue cortado de su ceja derecha, la sangre empezó a brotar y en medio de la impaciencia producto de los amarres, el Gallito intentó golpear con el hombro y la cabeza. Ahí si apareció el réferi para llamarle la atención al nica. En el noveno surgió algo similar. Rafael Ramos no pudo disimular los tres golpes bajos ilegales que Freshmart descargó en Rojas y le llamó la atención, más tarde lo haría el nicaragüense en venganza. El guion no cambió en lo absoluto. El juez Francisco Martínez puntuó 117-111, Uriel Aguilera 116-112 y Raúl Caíz 115-113.

Byron Rojas se comió el caramelo envenenado de Freshmart y salió dos años después con otra frustración. A sus 28 años no es el final pero es un punto de inflexión.

Deportes Byron Rojas archivo

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí