Pese a que en diez casos de presos políticos se han extendido órdenes de libertad, estas no han sido acatadas por las autoridades de la dictadura, señaló la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), en el informe presentado el pasado lunes, Día de los Derechos Humanos.
Uno de los casos más emblemáticos por la captura ilegal y los procedimientos que han surgido durante su detención ha sido el del maratonista Alex Vanegas, quien cuenta con una orden de libertad emitida el martes 4 de diciembre, pero hasta este miércoles 12 no se ha hecho efectiva, explicó el abogado de CPDH, Pablo Cuevas.
Otro de los casos corresponde a los jóvenes Guillermo Sobalvarro Oporta y Albert Einstein Monroe, quienes fueron declarados no culpables; a ellos los habían acusado de supuestamente ingresar a robar a la casa del comisionado orteguista Juan Valle Valle, jefe de Tránsito de Managua.
Cuevas explicó que esta situación de no acatar los mandatos judiciales ha sido evidente desde el año 2010, y que como organización han tenido conocimiento de casos de personas con órdenes de libertad que datan desde hasta tres años, y siguen en detención. Sin embargo, esta situación se recrudeció con los presos políticos, convirtiéndose en una constante, pese a que viola el artículo 167 de la Constitución Política de Nicaragua, que señala que las resoluciones judiciales son de ineludible cumplimiento.
Cuevas explicó que en los casos de los reos políticos es muy difícil que un juez extienda una orden de libertad; sin embargo, cuando se han dado estas condiciones, ninguna de las autoridades (Policía Orteguista y Sistema Penitenciario Nacional) lo cumple.
Por esas condiciones, aseguró que existe una colusión de las autoridades que integran las diferentes instancias del Estado, que solo obedecen directrices y persisten en la violación al derecho ciudadano de la libertad. “Es terrible como las autoridades se convierten en delincuentes porque el tener a un ciudadano detenido, a pesar de una orden de libertad, es un delito y quien comete delito es un delincuente”, expresó el abogado y defensor de derechos humanos.
Cuevas explicó que cuando existe una orden de libertad no cumplida, el ciudadano tiene derecho de hacer uso de la Ley de Amparo. Con la asistencia de un abogado debe presentar un recurso de exhibición personal ante el Tribunal de Apelaciones, este debe nombrar a la brevedad posible a un juez ejecutor para que se presente a la unidad donde está detenida ilegalmente la persona y exigirle al funcionario que lo tiene bajo custodia que lo exhiba y si tiene documentación sobre el caso debe revisarla.
Tomando en consideración su análisis sobre la información debe exigirle al funcionario que lo ponga en inmediata libertad y después de eso hacer un informe al Tribunal, indicó.
Total indefensión legal
Cuevas señaló que los ciudadanos se encuentran en una situación terrible de indefensión, puesto que persiste una directriz de no dejar en libertad a muchas personas.
Otro de los casos que han sido mediáticos es el de Carlos Valle, padre de Elsa Valle, exrea política. Este fue apresado el 15 de septiembre y posteriormente presentado ante medios oficialistas bajo los calificativos de “terrorista golpista”.
Valle y varios reos políticos han sido detenidos sin una orden judicial, llevan meses sin ser presentados ante una autoridad, es decir que permanecen en detención ilegal. Y en muchos casos, los familiares también han denunciado que los jueces ejecutores están fuera del país, están enfermos, o bien no quieren hacerse cargo de los reos políticos.
Don Alex sigue en El Chipote
Pablo Cuevas, abogado de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), recordó que el maratonista Alex Vanegas —quien se ha convertido en uno de los íconos de las protestas pacíficas contra el régimen de Daniel Ortega—, fue acusado por la Fiscalía de escándalo público, que no es un delito, sino una falta penal.
Don Alex fue detenido en el cementerio Milagro de Dios mientras daba el pésame a algunos familiares de las víctimas mortales de la represión, después, pese a estar detenido, giraron orden de captura y allanamiento, aduciendo rebeldía de Vanegas porque no se presentó a la audiencia. En esta no permitieron la entrada del abogado de CPDH y posteriormente se publicó la orden de libertad, pero el maratonista sigue secuestrado.
Doble filo con los Valle
Elsa Valle estuvo detenida en la cárcel de mujeres, pero el 26 de septiembre, el Juzgado Séptimo Distrito Penal de Juicio de Managua emitió una orden de libertad, que también incluía a Irma Centeno Rivera y Yuri Valerio Rivera, las tres estudiantes universitarias que habían sido acusadas de tenencia ilegal de armas de fuego por su participación en las protestas contra el régimen orteguista. Este fue uno de los casos en los que las autoridades acataron la disposición judicial, contrario a lo que ha sucedido con el padre de Elsa, Carlos Valle.