La red IFEX-ALC para la defensa de la libertad de expresión y la prensa libre, con presencia en quince países de América Latina y el Caribe, condenó las amenazas, agresiones, allanamiento y censura contra medios de comunicación y periodistas en Nicaragua así como el cierre de espacios cívicos, ejecutado por el régimen de Daniel Ortega.
Uno de los ataques más directos contra la prensa independiente ocurrió el sábado, cuando el director de Confidencial, Esta Semana y Esta Noche llegó a la sede central de Plaza El Sol, de la Policía, para demandar respuestas sobre la ocupación policial de sus medios de comunicación, pero fue agredido junto con otros periodistas por un grupo de policías antimotines.
Mediante un pronunciamiento, las 23 organizaciones pertenecientes a IFEX-ALC instó al Estado a abstenerse de utilizar el aparato estatal y las fuerzas armadas para atacar y censurar las voces críticas y cerrar el espacio cívico. Además, de abstenerse de “utilizar el aparato judicial para criminalizar a los medios de comunicación y periodistas”, y garantizar la existencia de una prensa libre e independiente como derechos de los ciudadanos y como una obligación para la democracia.
Señalaron que varios periodistas y medios de comunicación que han brindado cobertura sobre la crisis sociopolítica del país, han sido víctimas de agresiones físicas, amenazas, actos de intimidación, estigmatización, así como allanamiento policial, sustracción de equipos y documentos, privaciones de la libertad y amenaza de demandas penales.
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Entre los medios afectados se cuenta a Radio Darío, en León; canal 100% Noticias y recientemente, la revista Confidencial. Las radios comunitarias, Radio Humedales y Radio Voz Juvenil, están en riesgo por el cierre obligado por el Estado de la Fundación del Río tras la cancelación de la personería jurídica en días pasados.
Desde el pasado mes de abril, cuando se iniciaron las protestas contra del gobierno de Daniel Ortega, Nicaragua ha sufrido un fuerte deterioro del ejercicio de los derechos a la libertad de expresión y acceso a la información pública tanto de la sociedad nicaragüense en general, como de periodistas, medios de comunicación y defensores de derechos humanos, destaca el escrito.
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