Tres gasolineras de la empresa Puma fueron cerradas en Managua, pero también otra estación de la empresa Uno en Rivas y León sin que las autoridades del Instituto Nicaragüense de Energía (INE), el ente regulador, ofrecieran una explicación.
Las gasolineras afectadas en Managua están en Metrocentro, junto al Instituto Loyola y en el sector de la rotonda la Virgen.
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Un alto funcionario de la compañía Puma informó que el cierre fue provocado por incumplimientos menores de normativas que se registraron durante inspecciones del ente regulador en Managua, las cuales no especificó.
El funcionario dijo que, teniendo en cuenta que los incumplimientos fueron menores durante la inspección, el cierre podría ser temporal y no prolongarse más allá de dos días.
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Fuentes extraoficiales explicaron que, aunque cada gasolinera tiene un concesionario, Puma estaría mediando con INE para lograr la reapertura de las estaciones clausuradas en Managua.
Los tomó por sorpresa
La decisión tomó por sorpresa a los trabajadores de las gasolineras, pero también a los usuarios que se acercaron para llenar sus tanques.
El concesionario de la Puma de Metrocentro, Juan Carlos Habed, afirmó que les llegaron a cerrar a las 11:00 de la mañana de este jueves y que no le dieron información al respecto.
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Un trabajador de la estación la Virgen dijo que “estábamos trabajando de lo más normal, cuando notificaron el cierre”.
En la gasolinera junto al Instituto Loyola, uno de los funcionarios no tenía idea tampoco de las razones del cierre.
Privados se callan
LA PRENSA buscó la posición de la empresa privada sobre este caso, pero los dirigentes de la Asociación Nicaragüense de Petroleras, encabezadas por el señor Alfredo Cuadra, no hicieron ningún comentario sobre lo ocurrido.
La noticia se conoció desde la tarde de este jueves por comentarios en los cuales asociaban el cierre ordenado por INE a un castigo político con aquellos sitios donde los manifestantes en algún momento buscaron refugio en el contexto de las protestas.
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Desde el 18 de abril pasado, la ciudadanía salió a protestar contra el régimen de Daniel Ortega que reprimió a los manifestantes usando a la Policía y grupos paramilitares.
Según los organismos de derechos humanos, entre 325 y 535 personas fallecieron producto de la represión estatal.
Tanto el empresariado como la ciudadanía en general han demandado elecciones libres y Diálogo Nacional, pero Ortega hasta ahora se ha rehusado.
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En lugar de eso, la dictadura ha intensificado la represión y en su última etapa la ha dirigido contra periodistas y medios independientes. La otra hipótesis, planteada por los ciudadanos ante los cierres de los negocios, es que el
Estado intentaba beneficiar, cerrando a otras gasolineras, a la Distribuidora Nicaragüense de Petróleo (DNP), ligada a la familia presidencial. Sin embargo, ninguna autoridad se manifestó sobre ese comentario ciudadano.