La política del régimen orteguista ha trascendido fronteras por medio de sus consulados, al mantener las puertas cerradas a las demandas de nicaragüenses autoconvocados que protestan en el extranjero por la violación a los derechos humanos que vive el pueblo.
Yerling Aguilera, miembro de la Articulación de Movimientos Sociales de Nicaragua en Madrid, España, y Carlos Berríos, vocero de la Caravana Centroamericana en Solidaridad por Nicaragua en Costa Rica, explicaron que no han tenido la oportunidad de conversar con diplomáticos nicaragüenses, quienes tampoco han accedido a recibir pronunciamientos sobre las diferentes situaciones de represión que vive el país.
Aguilera explicó que uno de los ejemplos más emblemáticos sucedió hace dos meses y medio. Colectivos feministas de España hicieron un manifiesto de solidaridad con la Articulación Feminista de Nicaragua, que fue respaldado por más de cien organizaciones, y firmado por mil personas.
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El manifiesto iba a ser entregado en la embajada de Nicaragua, pero no se los recibieron y les dijeron “que tenían órdenes desde arriba de no recibirles”, contó Aguilera.
La situación no es muy diferente en Costa Rica. Berríos explicó que “ellos (los diplomáticos) responden a una lógica de censura, a una lógica de no rendir cuentas de sus actos, a pesar de ser funcionarios públicos, porque ellos siguen reafirmando esta política y práctica de Estado de no facilitar información, de ocultar todo lo que tenga que ver con su trabajo (…)”, expresó.
Tampoco en Estados Unidos
En Estados Unidos tampoco han podido hablar con diplomáticos nicaragüenses. Sin embargo, en una actitud similar a lo que sucede en Nicaragua, autoconvocados han identificado que trabajadores de la embajada toman fotos y videos a quienes llegan a protestar, pero nunca atienden sus preguntas, expresó uno de los integrantes de la Alianza Democrática Nicaragüense de Washington. Esta Alianza ha desarrollado cerca de 35 plantones frente a la embajada de Nicaragua en Washington, y cerca de 20 plantones frente a la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA).
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En Madrid, España, se han realez plantones frente a la sede diplomática de Nicaragua y en otras zonas de Barcelona.
En Costa Rica, que ha albergado a la mayoría de nicaragüenses que han salido del país, huyendo de la persecución política, los grupos autoconvocados han realizado cerca de diez plantones frente a la sede diplomática.
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