El Instituto Nicaragüense de Energía (INE) habría decidido quitar arbitrariamente la licencia de operación a varias estaciones de combustibles que desde el 18 de diciembre permanecen clausuradas en Managua sin ninguna explicación clara, según informaron a LA PRENSA diversas fuentes ligadas al sector.
Se teme que las estaciones retomen sus operaciones en los próximos días, pero esta vez con nuevos concesionarios, lo que mantiene la alarma, dado a que los actuales dueños tienen millonarias inversiones en estas estaciones.
“Efectivamente las gasolineras que fueron cerradas por motivaciones políticas van a ser abiertas en los próximos días, pero se las van a ceder a otros concesionarios en una acción arbitraria de parte de este gobierno”, reveló una de las fuentes, que prefirió no ser citada.
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El pasado 18 de diciembre, de manera sorpresiva las estaciones de Puma Energy ubicadas en Metrocentro, Larreynaga y la del sector del Loyola, fueron cerradas por el INE por supuestamente incumplir en ciertas normativas, que son rechazadas por estos.
“En realidad es falso, totalmente falso que hayamos incurrido en faltar en algunas normas, aquí lo que está claro es que quieren beneficiar otros intereses y eso lo van a ver en los próximos días”, denunció la fuente.
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Esta señaló que el día que las estaciones fueron clausuradas, el INE notificó de manera verbal la medida a los concesionarios y sin ninguna explicación. Luego el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales (Marena) llegó a las gasolineras y no encontró algún problema de incumplimiento de normas, pero pese a ello el INE ejecutó la medida.
“La verdad es que fuimos cerrados por cuestiones políticas, no encuentro otra razón y digo razones políticas porque nos quieren sacar de este negocio, sencillamente para beneficiar a las DNP Petronic, que son sus negocios; así se manejan las cosas en Nicaragua, aun pasando por encima de las normas establecidas porque, la verdad, cumplíamos con todas las normas de operación”, dijo otra fuente del sector.
Esta explicó también que las licencias de operación de las estaciones están debidamente actualizadas.
“No hay excusas para que las estaciones de distribución estén cerradas. Estamos dando la batalla legal, pero es el gobierno quien decide”, señaló otra fuente de ese sector.
El problema es que DNP Petronic es un negocio ligado a la familia presidencial, según han demostrado distintas investigaciones de LA PRENSA.
Otra fuente explicó que el Estado al cerrar las gasolineras en Managua y otros departamentos del país, intenta beneficiar a otras gasolineras ligadas a sus intereses.
Pese a que el cierre de las estaciones fue hace más de un mes, la empresa privada no se ha pronunciado al respecto.
LA PRENSA hizo un recorrido por las estaciones clausuradas y efectivamente estas aún se mantienen cerradas, sin embargo, se constató que un grupo de hombres pintaba las instalaciones de la estación de Metrocentro.
Se buscó la versión de la administración, pero no se obtuvo ninguna respuesta.