Las preocupaciones del Diriangén van en aumento y no se entienden. De la tropa de Mauricio Cruz se espera protagonismo, pelear los primeros lugares, y sobre todo dominar a adversarios que son inferiores futbolísticamente en teoría, pero se dejó empatar un partido que iba ganando el pasado miércoles y este sábado se puso en ventaja y la UNAN remontó 2-1.
Estos dos encuentros debían ser victorias para los Caciques y paso firme en la cima del Torneo de Clausura, sin embargo esta derrota de la cuarta jornada les impidió mantenerse en lo alto e inyectó preocupación por el comportamiento futbolístico actual, mientras los universitarios toman aire con su primera victoria y luchan por no descender.
Los diriambinos generaron muchas llegadas al área con jugadas de peligro de gol. La mayoría fueron acciones organizadas, pero inauguraron el marcador en una proyección de transiciones rápidas. Luis Camilo (37) recibió en tres cuartos de cancha, condujo el balón y entrando al área remató. La misma idea de juego se mantuvo aunque nunca apareció la jugada que sentenciara.
A pesar de todo, la UNAN no se rindió y con más corazón que futbol descontó. En una contra, el portero Aaron Chávez arrolló al atacante de los universitarios, a criterio del árbitro Nitzar Sandoval. Jonathan Zapata (73) tomó el esférico y lo guardó en la red, que poco después se volvió a estremecer: proyección por la banda, centro al punto de penalti y rechace a los pies de Rafael Baquedano (81), quien definió con potencia decretando el primer éxito universitario y el estancamiento del Diriangén.