La Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) lamentó la muerte de José Iván Cruz Gutiérrez, perseguido político de la isla de Ometepe que este 12 de febrero de 2019 se quitó la vida en una casa del barrio San Judas, ubicada en el Distrito Tres de Managua.
Al desatarse una cacería de Policía Orteguista y fanáticos orteguistas del Consejo de Poder Ciudadano en Ometepe, Cruz Gutiérrez estuvo semanas escondido en los cerros y hasta hace cinco semanas atrás logró salir de la isla.
Era hermano del preso político Max Cruz, quien fue capturado y baleado por la policía el 8 de octubre de 2018 junto a su esposa Marbi Salazar mientras desayunaban juntos a sus hijos en su casa de la isla y enfrenta un proceso judicial irregular, mientras sufre una infección en las heridas de bala.
“Nos ha afirmado una persona de la isla de Ometepe este lunes que él entró en una profunda depresión. Lo que tenía antes prácticamente ya no lo tenía. No podía ver a sus hijos, su familia, su hermano preso (y) muy enfermo y él en una situación de clandestinidad sin recursos”, informó Pablo Cuevas, abogado de la CPDH, quien aclaró que la decisión de suicidarse fue una consecuencia de la misma realidad.
“Era un hombre que sentía mucho respeto por el sistema democrático, respeto a los derechos humanos, era un líder comunitario y tengo entendido que él y su familia participaron en la lucha cívica que inició en abril del año pasado”. Pablo Cuevas sobre José Iván Cruz @laprensa
— Roy Moncada (@moncadaroy) 13 de febrero de 2019
Cruz Gutiérrez fue promotor voluntario de la CPDH años atrás y según Cuevas, quien lo conoció personalmente, era un líder nato. El Instituto de Medicina Legal ya entregó el cuerpo y será sepultado la tarde de este miércoles en Ometepe.
La esposa de Cruz Gutiérrez falleció hace dos años de paro cardíaco, con quien procreó dos hijos, de 13 y 15 años, según parientes. Los menores están al cuidado de los padres de Cruz Gutiérrez.
De cómo está Ometepe
Después de meses de cacería en Ometepe, Cuevas explicó que actualmente hay una “paz tensa”, donde los fanáticos y estructuras del régimen de Daniel Ortega mantienen un trabajo de espionaje.
“Nosotros recibimos denuncias que secretarios políticos pasan o mandan a personas civiles que estén constantemente rondando las casas de personas o de familias que ellos los consideran opositores o líderes en sus comunidades. Eso es lo que está sucediendo allá”, dijo Cuevas en conferencia de prensa.