Mientras el régimen de Daniel Ortega a través de sus personeros continúa “trancando” las negociaciones que sostiene con la Alianza Cívica, la Unión Europea (EU) abogó por un diálogo genuino e inclusivo que garantice elecciones transparentes y creíbles.
“El respeto de los derechos fundamentales, especialmente la libertad de expresión y reunión es esencial para restablecer la confianza. Un diálogo genuino e inclusivo también debería abarcar las reformas necesarias para garantizar elecciones creíbles. Esperamos que el gobierno restablezca la cooperación con las organizaciones internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y sus órganos, y permita el regreso de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos”, detalló la Comisión de la Unión Europea (UE) mediante un comunicado emitido el viernes.
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El diálogo entre el gobierno de Daniel Ortega y representantes de sectores opositores se reanudó este 27 de febrero en un ambiente de hermetismo y de escepticismo.
En la tercera sesión de las conversaciones, los equipos negociadores de nuevo no alcanzaron consenso, dado que el Gobierno continúa con su posición de rechazar a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a la Organización de Naciones Unidas (ONU), como los garantes.
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Ambas partes, al final de la tarde del viernes, luego de más de ocho horas de conversaciones, extendieron un comunicado en el que anuncian que continuarán las conversaciones el próximo lunes, las cuales buscarán el consenso sobre los tres puntos de 12 que han sido establecidos para la hoja de ruta que regirá las negociaciones para tocar los temas de fondo que tienen que ver con libertades, democracia y justicia.
Según un comunicado, emitido por la Alianza tras la sesión, algunos puntos sobre la hoja de ruta en los que se han alcanzado consenso son los “mecanismos para la toma de decisiones, horarios de reuniones, política de comunicación y divulgación, la naturaleza de los acuerdos a ser alcanzados y aspectos de logística”.
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Entre los puntos que aún no se definen están los nombramientos de mediadores y garantes internacionales, propuesta hecha por la Alianza Cívica, cuyo planteamiento ha sido rechazado por el régimen de Ortega argumentando “intervencionismo extranjero”. Esto es lo que tiene estancadas las conversaciones desde hace tres días, según fuentes extraoficiales.
El trabajo sutil de la diplomacia vaticana
Según información a la que tuvo acceso LA PRENSA, el gobierno orteguista habría pedido tiempo hasta el lunes 4 de marzo para reconsiderar si acepta esta propuesta por la Alianza Cívica.
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Según la fuente, la diplomacia vaticana a través de la presencia del embajador del papa Francisco en Nicaragua, el nuncio Waldemar Sommertag, trabaja “una sutil diplomacia” para aproximar a las partes en el diálogo y se logre el consenso en todos los aspectos de formas pendientes, para abordar temas más espinosos para el régimen, pero necesarios para superar la crisis que está a punto de cumplir un año, el próximo 18 de abril.
Juan Sebastián Chamorro y José Pallais Arana, miembros de la Alianza Cívica y participantes en las negociaciones, explicaron al final de la tarde, luego de concluir la tercera ronda de pláticas, que se trabaja intensamente para que se den las soluciones que el país demanda en materia de libertades, democracia y justicia.
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“Nosotros esperamos que dentro de poco tiempo se pueda oficializar la hoja de ruta. Sin reglas claras, sin reglas bien definidas, no se puede proceder a un diálogo serio y responsable, yo sé que las expectativas de la población son que estemos negociando ya los temas de fondo, pero de nada serviría negociar temas de fondo si no tenemos las reglas claras bien definidas, por eso la importancia de tener una hoja de ruta”, explicó Chamorro.
Por su parte, José Pallais expresó que “se está trabajando desde la Alianza de manera responsable de acuerdo con las demandas de la población dentro del marco de las libertades, la justicia y la democracia”.
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Ambas partes acordaron retomar conversaciones el próximo lunes para intentar superar el obstáculo impuesto por el régimen.
La prioridad
La Alianza Cívica expresó una vez más que la libertad de reos políticos es una de las prioridades en la mesa de diálogo.
“Nuestra demanda seguirá siendo libertades, democracia y justicia; pero la primera prioridad es la libertad de los presos políticos en las conversaciones”, confió José Pallais, del equipo negociador.
En relación con la liberación parcial de reos, Pallais aseveró “que es una medida unilateral y un gesto de buena voluntad del Gobierno”.