A cuentagotas. Así llegan los vehículos a los talleres para que se les realice el chequeo mecánico y la emisión de gases, dos exámenes que se exige cada año a los dueños de automotores en Nicaragua para circular.
LA PRENSA visitó varios talleres en Managua y constató que son pocos los dueños de automóviles que llegan a someterlos a prueba, en parte por el hábito de hacerlo hasta que los policías de Tránsito empiezan a multar, pero también por la crisis económica en el país.
Everth Palacios, propietario de un taller de Managua, autorizado por el Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI), explicó que en enero pasado fueron pocos los que realizaron las pruebas y que en febrero aumentó. Sin embargo es menor en comparación con la misma fecha del año pasado.
“Recordemos que es una ley de Estado que debe cumplirse, no es un capricho de alguien, para saber cómo anda el vehículo, si anda bien en cuanto a las emisiones de gases, si la combustión anda bien, porque si no está regulado puede representar un gasto mayor de combustible y a veces es grande, aparte de la afectación al medioambiente”, sostuvo Palacios.
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Otro aspecto que se garantiza con la emisión de gases y chequeo mecánico es la seguridad del conductor y los pasajeros.
David Castillo Pacheco, dueño de otro taller en la capital, manifestó que es hora de dejar de verlo como una imposición de la Policía y entender que garantiza la seguridad de las personas al asegurarse que no se contamina el medioambiente y la salud de las personas, en el caso de la emisión de gases, y se mantiene a salvo la vida al saber el estado del sistema de frenos, dirección, luces y suspensión.
“Cada dueño de vehículo es responsable de la condición mecánica, que ande en condiciones aceptables para moverse y evitar así un accidente de tránsito. Es un acto de irresponsabilidad, de cultura, no cumplir con la emisión de gases y chequeo mecánico”, dijo Castillo Pacheco.
Temporadas altas en los talleres
Aunque la reforma a la Ley para el Régimen de Circulación Vehicular e Infracciones de Tránsito, Ley 431, aclara que la emisión de gases y el chequeo mecánico tendrá la duración de un año calendario, en la práctica sucede que decenas de dueños que se les vence en los primeros dos meses del año esperan a que llegue Semana Santa para ir a renovar los certificados y de esa manera evitar ser multado en las carreteras cuando van o regresan del interior del país, principalmente las playas, lagunas y ríos.
Ante esto es que en los días previos de la Semana Mayor los talleres que brindan el servicio se saturan de vehículos. En la desesperación por tener renovados los certificados, muchos conductores llegan desde la madrugada a las afueras de los talleres para ser de los primeros en ser atendidos.
Según la Ley 431, las personas que conduzcan vehículos con certificados vencidos de emisión de gases e inspección mecánica están sujetos a una multa de 320 córdobas.
Contra reloj el sticker
Los dueños de vehículos todavía tienen un poco más de dos semanas para pagar el rodamiento y tener el sticker que le exime de una multa por el valor de cien córdobas.
A partir del 1 de abril, quien no ande la calcomanía de rodamiento, podría ser multado por policías de Tránsito.