La paciencia llegó a su límite. Esperar un día más sin hacer presión o pronunciarse era demasiado. Por eso los jugadores del Diriangén decidieron hacer pública una carta de protesta en la cual expresaron que dejaban de entrenar hasta que la directiva les diera una respuesta concreta sobre los tres meses sin pagarles.
“Por este medio los miembros activos del Cacique Diriangén FC se dirigen a usted (Andrés Cuadra) y el resto de miembros de la junta directiva debido al incumplimiento salarial (tres meses). Por tal motivo hemos tomado la postura de no continuar con los entrenamientos hasta la respuesta inmediata sobre la cancelación total del salario atrasado”, expusieron los jugadores en la carta firmada con fecha de 28 de marzo.
La denuncia la dio a conocer el colega diriambino José Luis Hernández en sus redes sociales en la que aparecen las firmas de todos los integrantes, sobre todo, los principales. “La mayor parte de lo adeudado será sufragado con lo que tiene presupuestado la municipalidad para el equipo, ellos (la Alcaldía) han estado en constante comunicación con nosotros, solo piden un poco de calma”, indicó Sergio Salázar, gerente del equipo.
No ha podido librarse
No es la primera que el Diriangén pasa por una situación similar. En los últimos 12 años, ha estado cuatro veces con más con al menos un mes de atraso salarial, pero solo en tres se fueron a huelgas: 2007, 2013 y 2016. En el 2014 resistieron la situación adversa.
La última huelga (2016) no duró más de un día por la rápida intervención de la directiva. A partir de ahí, exactamente en 2017, la situación económica del equipo mejoró cuando asumió el empresario Nicolás Bolaños como nuevo presidente logrando el primer título del equipo en 12 años. El directivo dejó el cargo por diferentes motivos el año pasado y al parecer volvió la inestabilidad de antes.