Yonarqui Martínez tiene 35 años. Nació en Managua, aunque su madre es de Granada y su padre de León. Abogada de profesión. Es especialista criminalista: lavado de activos y narcotráfico, crimen organizado y derechos Humanos. En los últimos meses se le ha visto defendiendo a presos políticos de Nicaragua. Actualmente lleva 70 casos, de los cuales 30 han sido excarcelados.
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¿Lo más difícil de ser una defensora de derechos humanos?
El riesgo al que te enfrentás y no sabés si llegarás con vida a casa. Lo mejor es defender a las víctimas de la represión orteguista.
¿Qué la motiva a seguir con su trabajo?
La vocación de servicio y amor al prójimo.
¿Qué quería ser de adulta cuando era niña?
Chef profesional o médico.
¿Cuál era su serie de dibujos animados favorita?
Los Picapiedras o los Súper Sónicos.
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Si fuese capaz de cambiar algo en el mundo… ¿qué cambiaría?
La desigualdad de género y abogaría por más inclusión de la mujer en los poderes del Estado.
Si tuviera diez segundos para un deseo, ¿qué pediría?
Sabiduría.
¿Qué superpoder querría tener?
Mental.
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¿En qué época le hubiese gustado vivir?
Colonización.
¿Qué es lo que le pone más nerviosa?
(Ríe) Mi mamá enojada.
¿Algún refrán favorito?
Piensa mal y acertarás.
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¿Alguna manía o hábito extraño?
Me levanto todos los días a las 3:00 de la mañana.
¿Practica o practicó algún deporte?
Practiqué jiu-jitsu y atletismo.
Un sueño no cumplido…
Conocer la cataratas de Niágara.
¿Cómo se describiría en tres adjetivos?
Única, amorosa, entregada.
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¿Ha estado a punto de morir?
Sí, en varias ocasiones. Hace dos años en manos del padre de mis hijos, llegó a casa con actitud violenta. Delito que hasta hoy sigue impune. En enero unos paramilitares en Carazo… y otras.
¿Qué olor lo traslada a su infancia?
El pan recién salido del horno.
¿Toca algún instrumento musical?
Sí, la guitarra.
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¿Cuál es el último libro que leyó?
En un mundo de hombres de Magda Enríquez Callejas.
Si pudieras cenar con cualquier personaje histórico, ¿a quién elegiría?
Eva Perón.