A partir de este lunes 20 de mayo LA PRENSA ha reducido a 8 las páginas de su edición impresa, por falta de papel y otros insumos que desde hace 37 semanas están en las bodegas de Aduanas, secuestrados por la dictadura.
Del mismo modo, el periódico Hoy que también es una publicación de Editorial La Prensa SA y sufre la represión de la dictadura contra la libertad de prensa, ha debido reducir otra vez la cantidad de páginas que ofrece diariamente a sus lectores. Y es necesario decir que esta agresión del régimen de Ortega y Murillo afecta también a El Nuevo Diario y sus publicaciones acompañantes.
Con el mayor descaro, el delegado del régimen orteguista en el mecanismo del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que examinó la semana pasada la situación de Nicaragua, aseguró que en este país “existe plena libertad de expresión” y que “ningún periodista ha sufrido cárcel o persecución”. Lo dijo sin sonrojarse, ante el estupor de los demás delegados internacionales que conocen muy bien lo que ocurre en Nicaragua.
Todos esos funcionarios de otros países saben por los informes de los organismos internacionales de derechos humanos, que el periodista Ángel Gahona fue asesinado en abril de 2018 mientras informaba sobre los disturbios; que los periodistas Lucía Pineda y Miguel Mora están presos y acusados de cometer increíbles crímenes inventados por el régimen; que decenas de periodistas se han ido al exilio para escapar de la persecución y el asedio al periodismo independiente; que medios de comunicación como Radio Darío, 100 % Noticias, las revistas Confidencial, Esta Noche y
Esta Semana fueron allanadas y saqueadas por la Policía. Y tienen que saber que el régimen orteguista se niega a entregar el papel y demás insumos a los periódicos impresos independientes, a pesar de que han pagado los derechos correspondientes, solo con el fin de ahogarlos y hacerlos desaparecer.
Sin embargo, más allá de las mentiras y a pesar de las agresiones de la dictadura, aunque con menos páginas seguimos cumpliendo el deber y ejerciendo el derecho de llevar a los nicaragüenses información independiente y veraz. Continuamos cumpliendo el legado del doctor Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, de defender el derecho sagrado e irrenunciable a la libertad de expresión y de prensa, como lo ha hecho siempre LA PRENSA en sus más de 93 años de azarosa existencia.
Como se dice en el comunicado publicado en los últimos tres días explicando las razones de la reducción de su paginaje, “LA PRENSA circulará con menos páginas pero con la misma independencia”. Y ha recordado que ya lo hizo antes, “durante la primera dictadura sandinista de la década de los 80”, en la cual, también hay que decirlo, Daniel Ortega era igual que hoy la feroz figura dictatorial predominante.
LA PRENSA circula a partir de hoy con menos páginas, pero con la misma y mejor calidad informativa, con más dignidad y con mayor decisión de seguir hacia adelante.