Autoridades nicaragüenses entregaron la noche de este martes en el puesto fronterizo de Peñas Blancas a cuatro sujetos, presuntamente miembros del grupo terrorista Estado Islámico (EI), a la Dirección General de Migración y Extranjería de Costa Rica.
Los sujetos fueron capturados el mismo martes por el Ejército de Nicaragua, quien los entregó a la Policía Orteguista (PO) para su respectiva deportación.
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“Los tres hombres, de apellidos Ibrahim, Eissa y Mohamed, y un cuarto identificado como Yaoob, de nacionalidad iraquí están siendo traslados por la Policía Profesional de Migración, con los protocolos de custodia necesarios, hacia el Centro de aprehensión Región Central donde se tomarán las medidas de seguridad correspondientes para personas con un alto perfil de peligrosidad”, asegura Migración de Costa Rica a través de un comunicado emitido después de haber recinido a los presuntos terroristas.
La autoridades ticas además informaron que los cuatro sujetos permanecerán en el Centro de aprehensión Región Central hasta que definan la fecha y el destino a donde serán deportados.
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Según las autoridades ticas, quienes aseguraban que eran tres los presuntos terroristas, los detenidos ingresaron a territorio tico el pasado 9 de junio procedentes de Panamá, a donde llegaron el 12 de mayo. Los presuntos miembros del EI ingresaron a Costa Rica como parte del flujo controlado que mantiene con Panamá.
“A través del proceso de ingreso Costa Rica hace las consultas correspondientes de los datos biométricos capturados, siendo que a la fecha de ingreso no contaban con alertas en los sistemas de seguridad nacional e internacionales”, indica el comunicado de las autoridades costarricenses.
Además, la Policía de Migración indicó que hasta ahora, los cuatro sujetos “no cuentan con alertas en los sistemas internacionales, únicamente un boletín que circula, enviado posterior al ingreso de estas personas a nuestro país”.
Alerta se emitió después que sujetos salieran de Costa Rica
Por su parte, el presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado, aseguró en conferencia de prensa que el ingreso de los presuntos terroristas a suelo tico no representa “ningún acto de negligencia” por parte del gobierno costarricense y que la alerta de Estados Unidos fue emitida después de que los sujetos salieran de Costa Rica.
“Costa Rica hizo todo lo estuvo en su margen para identificar eso y la alerta no se levantó en ese momento. No hay señal de que hubiera ningún acto de negligencia”, resaltó Alvarado sobre el actuar de las autoridades costarricenses.
Alvarado también señaló que los registros de ingreso de estas personas a Costa Rica fueron enviados inmediatamente a los respectivos socios de inteligencia que tiene en la región. “Toda la información se compartió tanto con Panamá como con los distintos socios regionales del detalle de estas y otras personas en el flujo migratorio”, agregó el mandatario costarricense.
El presidente costarricense aclaró que pese a que su administración registró sin problemas el ingreso de estos sujetos a suelo tico “no se levantó ninguna alerta y bien que se informó y en el caso particular con detenido interés dada las nacionalidades”.