Melvin Ramírez Rocha, de 22 años, fue asesinado a balazos y machetazos la mañana del lunes 22 de julio en el sector llamado Los Olivos, de la comunidad Oskiwas, microrregión de Bocay del municipio de San José de Bocay, departamento de Jinotega.
En las averiguaciones policiales, Saúl Ortuño Rodríguez, de 26 años, fue señalado como sospechoso del crimen calificado preliminarmente como asesinato.
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Según las versiones preliminares, a las 6:00 a.m. del lunes Ramírez llegó a buscar a Santana Ramírez Ortuño, para reclamarle porque este presuntamente “andaba diciendo que (el primero) le había robado una bestia mular”.
Ortuño, quien estaba a 500 metros de la escuela Los Olivos, presuntamente respondió que “habían visto” a Ramírez llevarse la bestia, pero de inmediato se fue del sitio y “lo dejó hablando solo”, dijo una fuente a LA PRENSA.
Sin embargo, Ortuño vive a cien metros y al escuchar los reclamos le habría dicho a su padre Ramírez Ortuño: “déjeme, que hoy elimino esta peste”, procediendo a dispararle con un arma de tipo y calibre sin precisar.
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Una de las balas impactó al lado derecho de la cara con orificio de salida en la parte trasera de la cabeza; en tanto, un segundo disparo penetró en la espalda y salió por el pecho de Ramírez. Acto seguido, el sospechoso asestó varios machetazos en distintas partes, cercenandole la mano derecha. Ortuño se fue del sitio y está siendo buscado por las autoridades policiales.
Con este caso, al menos 18 personas han sido asesinadas este año en circunstancias y lugares diferentes de San José de Bocay, colocándolo como el municipio con mayor cantidad de crímenes de etiología homicida en el departamento de Jinotega en lo que va de 2019.