Han llegado a tocar el cielo del boxeo. Han cosechado victorias, fama y mucho dinero. Pero en medio del éxtasis no han logrado administrar de manera correcta todo el capital que han generado. Estos son algunos de los boxeadores que han caído en desgracia.
- Uby Sacco, el “boxeador maldito”
Admirado por Maradona. Sacco es otro campeón del mundo que terminó en desgracia. Su vida desordenada y llena de escándalos y cocaína hicieron que Uby ocupara muchas veces las portadas de los periódicos. Su pelea más difícil no fue sobre el ring. Fue una noche de parranda en la puerta de un cabaret de Mar del Plata a finales de 1980, contra un marinero que lo apuñaló luego de discutir. Solo bastó un cross con esa derecha fatal para que el marinero terminara derribado. Uby Sacco estuvo preso en la cárcel de Batán bajo investigación por posesión de drogas. Murió en absoluta pobreza el 28 de mayo de 1997, a los 41 años, en Mar del Plata, Argentina.
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2. Ricardo Mayorga y la decadencia
El punto más alto de su carrera fue cuando le ganó Vernon Forrest, en enero de 2003. Luego de esa victoria que lo hizo aparecer en muchos medios internacionales la carrera del Matador ha estado llena de altos y bajos. El nicaragüense pasó de pedir prestado para el pasaje del bus a conducir autos deportivos e incluso se habla de que participaba de carreras ilegales en Managua. Derrota tras derrota, Ricardo Mayorga en cada combate cobraba menos. Solo peleaba para pagar sus deudas. Se le ha visto amanecer, entrar y salir de centros nocturnos, en total estado de ebriedad. Lo que prometía ser una carrera exitosa que paralizaba el país al comienzo, se trasformó en un chiste y luego fue perdiendo efecto, hasta caer en burlas y memes.
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3. Mike Tyson, en bancarrota
Es uno de los campeones de los pesos pesados más famosos de la historia. Ni los puños de Holyfield lograron poner contra las cuerdas a Tyson. Solo la bancarrota lo hizo. En 2004 se declaró quebrado. Su cuenta bancaria para esas fechas apenas tenía unos 5,500 dólares, y lo peor eran sus deudas millonarias. Su vida extravagante y llena de excesos lo hizo gastarse su fortuna acumulada en 20 años, que muchos expertos calculan en unos 300 millones de dólares. Hoy en día se ha recuperado de la quiebra, pero nunca llegó a recuperar todo el dinero que había perdido.
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4. Joe Frazier y el cáncer
Joe Frazier se convirtió en leyenda con la trilogía de enfrentamientos contra Muhammad Alí. Smoking Joe, como lo apodaron, fue campeón olímpico en los juegos de Tokyo de 1964. Luego de ganar mucho dinero y alcanzar la gloria para finales de 1980, estaba viviendo de la caridad. En 1990 recibió su último reconocimiento al entrar al Salón Internacional de la Fama del Boxeo. En 2011 se le diagnosticó un tumor en el hígado. Sus últimos días los había pasado entrenando a jóvenes boxeadores. Frazier murió el 7 de noviembre de 2011, en una clínica para enfermos terminales en Filadelfia, Estados Unidos.
5. Antonio Cervantes Reyes “Kid Pambelé”
A los 18 años empezó a boxear. Solo realizó tres peleas como aficionado y sus primeras 32 peleas como profesional fueron en Colombia. Ganó 27, perdió 4 y empató una. Pambelé es considerado el mejor welter junior de la historia, ganó dos veces el título. En 2000 fue declarado el Boxeador del Siglo de Colombia por la Federación Colombiana de Boxeo y la Asociación nacional de Boxeo Profesional. Por dicho premio, la AMB le entregó un cinturón conmemorativo especial. Para 1980, Cervantes ya estaba inmerso en el mundo de las drogas y el alcohol, según ha declarado en varias entrevistas a la prensa colombiana. Su vida era una fiesta constante, de derroche de dinero, mujeres y todo tipo de excesos hasta tener que recurrir a centros de rehabilitación. Acabó con el capital que había acumulado durante su trayectoria. Sin embargo, Cervantes volvió del retiro debido a problemas financieros y siguió boxeando hasta 1983, luego continuó como entrenador.
Su vida de fama y desgracia inspiró el libro “El oro y la oscuridad”, del periodista Alberto Salcedo Ramos, quien en 80 episodios cuenta la vida gloriosa y trágica de Antonio Cervantes “Kid Pambelé”, el boxeador más importante de la historia colombiana.