El dictador Daniel Ortega aprovechó el acto de recibimiento y entrega de la Antorcha de la Libertad para hablar de los miles de migrantes centroamericanos que huyen de sus países por la violencia generada por las pandillas, pero no mencionó a los más de 82 mil nicaragüenses que se han visto forzados a huir del país por la represión estatal desatada en abril de 2018.
“Este es un recorrido de la Antorcha de la Libertad por la paz, por la paz para las familias centroamericanas que tienen que huir de sus países buscando los Estados Unidos porque los están asesinando en su propio país los narcotraficantes, los de las famosas pandillas que cobran impuesto (…) y si no pagan, matan, los asesinan y por eso vemos a tantos miles de hermanos centroamericanos en caravanas huyendo hacia los Estados Unidos, por eso tenemos que luchar por la paz de todos”, dijo el dictador.
Desde abril del año pasado, 328 personas han muerto producto de la represión iniciada el 18 de abril en contra de las manifestaciones ciudadanas hacia del régimen orteguista, según documentó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Asimismo, cientos de personas fueron encarceladas y miles se fueron al exilio.
Puede interesarle: «Estamos viviendo diferentes formas de represión contra el sector privado», denuncia el Cosep
Solo en Costa Rica, al menos 68 mil nicaragüenses han solicitado refugio desde abril de 2018, según cifras del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur). Otros tantos se han ido a Panamá, México, Estados Unidos, España, entre otros países.
Estados Unidos, la OEA y el TIAR
En su discurso, Ortega se refirió además al encuentro que sostuvo este miércoles la Organización de Estados Americanos (OEA) para discutir la aprobación de la activación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR), en contra de Venezuela, que contempla el uso de la fuerza armada.
Lea además: Las 10 mentiras que dijo el vicecanciller de Nicaragua Valdrack Jaentschke, en Ginebra
Al respecto, el dictador señaló que Estados Unidos y la OEA utilizan el TIAR para “agredir y hacer el daño a los pueblos latinoamericanos y caribeños” en vez de defenderlos. “Hay una votación donde desgraciadamente hay algunos gobiernos (que) no responden a lo que es su propia Constitución, a lo que son sus propias leyes y bajo la presión de los Estados Unidos votan a favor de la guerra”, expresó Ortega.
Ortega aseguró que los conflictos se resuelven mediante el diálogo pero solo aquel donde se involucre al “pueblo”. “El camino es el diálogo, el diálogo entre los trabajadores, entre los campesinos, entre el pueblo, entre las familias para seguir desarrollando la economía y seguir mejorando las condiciones de vida de la familia, que eso es lo que quiere el pueblo”, puntualizó.
En Nicaragua, el diálogo entre la Alianza Cívica, que agrupa a diferentes sectores de la oposición, y el régimen se suspendió debido a la negativa de Ortega de discutir temas de democracia para el país.