Amigos, familiares, excompañeros de equipo y selección acompañaron los restos del mejor jugador en la historia del futbol nicaragüense, el portero Róger Mayorga, quien falleció de un infarto el pasado 5 de octubre en su casa de habitación en el barrio Altagracia en Managua.
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La Federación Nicaragüense de Futbol (Fenifut) y la Fundación Salón de Fama del Deporte Nicaragüense organizó un homenaje póstumo este martes en el antiguo Estadio Nacional de Beisbol, donde llegaron diferentes exjugadores y federados para rendir honor al guardameta, quien tuvo una carrera internacional de 17 años y fue exaltado al Salón de la Fama en 1994.
“Es una gran perdida, yo lo vi jugar desde pequeño en el Estadio de Tegucigalpa, Honduras, se desarrolló en muchos equipos importantes de Centroamérica, pero Motagua el equipo de su corazón. Es una emoción bien grande verlo jugar porque yo quería ser como él. Fue el mejor”, indica Roger Mayorga Jr, durante el homenaje.
“Le doy gracias a la prensa de Nicaragua, la familia y amistades que están aquí. Siempre será un ejemplo para las personas jóvenes que quieren salir adelante, hay que impulsarse en el deporte, que tenga el apoyo del Gobierno, colegios y organizaciones deportivas. Tenemos mucho que dar en Nicaragua, hay mucho talento que tiene que ser apoyado para llevar el nombre de Nicaragua en alto”, asegura el hijo de la leyenda del futbol nacional.
El cuerpo de Mayorga fue incinerado y sus hijos llevarán este sábado por la mañana las cenizas a los Estados Unidos donde viven actualmente para enterrarlo allá. Adiós al mejor jugador de la historia del futbol nicaragüense.