El gobierno interino de Bolivia anunció que rompe relaciones con Venezuela.
La canciller en funciones, Karen Longaric, aseguró que pedirán a los diplomáticos “que representan al gobierno de Nicolás Maduro” que abandonen el país.
Longaric también anunció que el nuevo gobierno, establecido tras la renuncia de Evo Morales el 10 de noviembre, abandona la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y analiza su desvinculación de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), dos organizaciones forjadas por el eje progresista con el gobierno venezolano.
- 5 claves que explican por qué Evo Morales renunció a la presidencia de Bolivia4 símbolos con los que la presidenta en funciones de Bolivia quiere diferenciarse del gobierno de Evo Morales
Los anuncios se produjeron en el marco de una rueda de prensa donde se presentaron a 9 venezolanos arrestados por las autoridades bolivianas, acusados de instigar las protestas en contra del gobierno en funciones.
Según la policía, fueron encontrados con armas de grueso calibre.
“Bolivia no tolerará ninguna injerencia del gobierno de Venezuela”, dijo el ministro de gobierno interino, Arturo Murillo.
“Durante 14 años han hecho lo que han querido”, indicó, en referencia a la alianza del país con Venezuela y Cuba durante la última década.
Los gobiernos de Cuba y Venezuela fueron los más cercanos del gobierno de Morales, lo cual se manifestó en acuerdos políticos, comerciales y militares.
Las relaciones entre Caracas y La Paz siempre fueron criticadas por la oposición a Morales con el argumento de que Venezuela estaba injiriendo en la política local.
Días de tensión, con el foco en Venezuela y Cuba
El jueves, las autoridades bolivianas arrestaron a 4 miembros de las Brigada Médica Cubana que supuestamente estaban financiando protestas violencias contra el gobierno en funciones.
El gobierno cubano, que rechazó dichas detenciones, decidió retirar a más de 720 funcionarios para “evitar fricciones”.
Las elecciones presidenciales del 20 de octubre dejaron una profunda crisis política en Bolivia.
Una auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) encontró irregularidades en unos comicios cuyo conteo fue inesperadamente interrumpido.
La candidatura de Morales, que buscaba un cuarto mandato, era considerada ilegal por la oposición.
Días de protestas contra el gobierno de Morales dieron finalmente con la renuncia del primera presidente indígena en la historia del país, quien el miércoles 13 viajó a México en calidad de asilado político, puesto que según él corría peligro en su país.