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Estudiantes autoconvocados de varias universidades realizaron un plantón frente a la UCA en defensa del seis por ciento. LA PRENSA/ARCHIVO

Universidades privadas deben matricular unos 500 estudiantes para afrontar la crisis sociopolítica

Según las estimaciones del Cosup, integrada por catorce universidades privadas, en estas, unos 25 mil estudiantes no regresaron a las aulas de clase después del estallido social de abril de 2018.

Ante la incertidumbre que ha provocado la crisis sociopolítica que corre por su vigésimo mes, las universidades privadas tienen el reto de alcanzar, por lo menos, la matrícula que lograron en el 2019, aseguró el presidente del Consejo Superior de Universidades Privadas (Cosup), Adán Bermúdez.

Según las estimaciones del Cosup, integrada por catorce universidades privadas, en estas, unos 25 mil estudiantes no regresaron a las aulas de clase después del estallido social de abril de 2018. Bermúdez explicó que debido a que la crisis sigue profundizándose el desafío de mantener la matrícula del año anterior en el 2020 va a ser difícil, y avisora que podría disminuir de 10 a 15 por ciento.

“Yo creo que les va (universidades) a ser difícil, ojalá y fuese posible, pero me supongo que va a seguir bajando. A lo mejor puede bajar un diez, quince por ciento más esta nueva matrícula con relación a la matrícula que tenían el año pasado, que es una matrícula ya en condiciones de la crisis económica de los nicaragüenses”, expresó.

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Antes de la crisis una universidad privada podría matricular mil estudiantes, ahora los nuevos ingresos van de 500 a 600. Ese número es lo que deberían registrar las casas de estudios para el próximo año lectivo.

Este efecto ha sido muy significativo en las universidades, explicó Bermúdez, ya que continúan haciendo ajustes en sus presupuestos internos, en la valoración de cargas horarias, valoración de salarios de funcionarios, todo con el “objetivo de poderse ajustar y tratar de mantenerse, sobrevivir para esperar unas mejores épocas económicas de Nicaragua”, dijo.

De acuerdo con cifras oficiales del régimen orteguista, en el 2019 se bachillerarán 62 mil jóvenes, y de estos, el 89 por ciento aspira a ingresar a la universidad. Las estimaciones del Cosup indican que unos 20 mil estudiantes podrían formar parte de todo el sistema de educación superior, que incluye universidades privadas y públicas, cuando antes era un poco más del doble.

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Si las casas de estudios privadas no logran mantener las matrículas logradas en el 2019 es probable dijo Bermúdez que tengan que revisar su estructura de gastos, de bienes y servicios. También podrían valorar alargar los encuentros de clases con los estudiantes, apostar mucho más por las clases en línea, y una acción más radical sería, suspender temporalmente.

Recorte en presupuesto

Este año la Universidad Centroamericana sufrió un recorte del 26.7 por ciento, eso afectó a más de dos mil estudiantes de nuevo ingreso que no recibieron becas.

Para el economista Luis Murillo, existe poca visión por parte del Estado en materia de inversión en capital humano. Ya que al afectar el presupuesto para educación menos bachilleres van acceder a la universidad porque no tienen posibilidades de becas. Se están priorizando políticas económicas para mantener una cierta estabilidad muy débil, pero sacrifican el factor de desarrollo de mayor importancia, que es el capital humano.  “Se está condenando el país a seguir en los niveles de pobreza”, expresó.

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