El rey regresa al trono. Han pasado dos años desde la última vez que el Real Estelí lo ocupó. Es el tiempo más largo atravesado porque siempre dominó la Juvenil Especial, el torneo que sirve de antesala a Liga Primera. Su ausencia se debió en parte a que la generación de esos momentos coincidió con que los demás equipos se preocuparon por mejorar hasta reunir un grupo muy sólido como el alcanzado por el Managua FC, campeón de las dos ediciones anteriores.
Los estelianos celebraron en casa este viernes por la noche. El empate sin goles ante el Real Madriz les valió para levantar el trofeo 16 de su historia, tras la victoria (1-2) conseguida en Somoto hace una semana, en un desafío más abierto. El Madriz llegó al Independencia con la obligación de arriesgar sin perder el balance defensivo porque los norteños poseen jugadores desequilibrantes como Patrick Huete y Justing Cano, el líder goleador del equipo con 12 tantos.
A pesar de las constantes oportunidades para marcar, la tropa dirigida por Holver Flores careció de la puntería necesaria para concretar y decidir el título con antelación. El choque tuvo intensidad de principio a fin y las fricciones aumentaron en el complemento terminando con un expulsado por equipo a la hora de juego: Jasser Novoa, de Estelí, y Joel Obando, de Madriz, por un conato de pleito empezado por ellos.
En los minutos finales, el Estelí dio el extra por conseguir el triunfo. El esfuerzo no tuvo recompensa pero el trabajo estaba hecho, el Tren del Norte recuperó la hegemonía perdida en la Juvenil Especial dos años después con una generación de futbolista que promete mucho por su talento y capacidad para seguir creciendo porque viene conseguir el subcampeonato en el Torneo Interclubes Uncaf.