Una turba de 17 hombres en motocicletas llegó la madrugada de este viernes a vandalizar Radio Darío, en León, según su propietario Aníbal Toruño.
La emisora opositora, que fue incendiada en abril de 2018, ha sufrido otros ataques como el ocurrido en septiembre del año pasado, cuando Toruño regresó al país tras un período en el exilio provocado por amenazas en su contra.
La denuncia ocurre cuando la atención se centra en el caso de la periodista del New York Times, Frances Robles, quien relató que en noviembre pasado fue víctima de robo a manos de simpatizantes sandinistas cuando daba cobertura al asedio policial a la Iglesia San Miguel, en Masaya, cuyo párroco es el sacerdote Edwing Román.
Según Toruño, en el ataque del viernes en la madrugada un hombre, con un casco de motocicleta que impedía que se le reconociera plenamente, destruyó una de las cámaras del circuito de seguridad en la emisora.
Para Toruño, la violencia contra su medio de comunicación corresponde a un patrón ejercido por parte de operadores del Frente Sandinista en León, que atacan, asedian y destruyen.
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Con barras y piedras
La turba llegó a eso de la una de la madrugada con barras y piedras para vandalizar la emisora, pero primero destruyeron la cámara que enfocaba la parte frontal de la radio y ocultar sus fechorías, explicó el propietario.
“Quieren evitar, quieren detener la capacidad de la radio de poder seguir haciendo lo que nosotros hemos venido haciendo, que es ejercer la libertad de expresión”, argumentó.
La nueva agresión contra la radio se da en un contexto adverso para el ejercicio profesional. Este jueves el Observatorio de la Libertad de Prensa Independiente en Nicaragua, de Periodistas y Comunicadores Independientes, denunció que en el país los periodistas son víctimas de amenazas, hostigamientos, agresiones, robos de equipos, entre otros delitos. Las agresiones son dirigidas por policías, parapoliciales y fanáticos orteguistas, según las denuncias.
A las víctimas hay que sumar a Ricardo Moncada, presidente de la Asociación de Agricultores de León, según la emisora, que denunció que las mismas turbas que llegaron a la empresa hicieron daño en la vivienda del empresario.
LAPRENSA/CORTESÍA
Abuso tras abuso
Además de los constantes ataques de turbas orteguistas contra Radio Darío, las familias opositoras en León sufren el asedio no solo de los fanáticos del régimen, sino de la Policía.
A finales de noviembre, el comisionado mayor Fidel Domínguez irrumpió en la casa de la familia Reyes Alonso, los golpearon, robaron y los obligaron a repetir consignas ajustadas al discurso del orteguismo.