“Me quiero morir, ¡mi niña!”, gritaba desde el interior de la vivienda la madre de la niña Keysi Laguna Reyes, de dos años, quien falleció al ser arrollada por un Jeep.
Los desgarradores gritos se oían hasta afuera de la casa, en el andén de tierra donde los vecinos y familiares también lloraban la muerte de la menor.
El dramático hecho ocurrió en el barrio 8 de Marzo de la capital, cerca del mercado Iván Montenegro, el mediodía de este miércoles.
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La menor estaba jugando con otros niños afuera de la vivienda, cuando pasó el Jeep que era conducido por el pastor evangélico Juan Hudiel Larios, de 62 años.
El vehículo le pasó encima de la cabeza. Según testigos, el pastor dijo que no vio a la menor, quien fue trasladada en un carro particular a un hospital, donde llegó sin vida.
Llantos tras aviso de muerte
Un familiar llamó y avisó de la muerte de la menor y fue ahí cuando vecinos y familiares rompieron en llantos y gritos. Hasta los niños que viven en el andén lloraban la muerte de la pequeña.
El pastor evangélico se estacionó a unos 10 metros de distancia de donde arrolló a la menor y posteriormente fue trasladado al Distrito Siete de la Policía. El abuelo de la niña interpuso la denuncia en el mismo distrito policial.
Hudiel andaba visitando a una señora que vive a unas cuantas casas de donde residía la niña con su familia. Cuando fue atropellada, la niña se encontraba al centro de una calle de tierra.