Después de cuatro partidos, los Tigres sienten el sol chinandegano a la altura de los párpados, sangran profusamente y han quedado sin margen para el error en la Serie Final.
Eso sí, todavía respiran y mientras hay vida, hay esperanza, aun cuando ha quedado la impresión de que no tienen escapatoria frente a unos Leones que lucen más hambrientos.
Los Leones tropezaron de manera dramática en el duelo inicial y tras ganar con apuro el siguiente juego, han propinado dos palizas en las que han lucido claramente superiores.
León ha bateado como se espera que lo haga un equipo de ataque solvente, ha defendido con mucha firmeza y su picheo ha sido un buen complemento al esfuerzo ofensivo.
Al bateo de los Tigres lo han frenado y su picheo no ha logrado sujetar a León, lo que los ha llevado a sufrir dos palizas seguidas, que por lo general afectan el estado anímico.
Sin embargo, en beisbol no hay que descartar ninguna posibilidad. Incluso que los Tigres puedan levantarse y revertir la Final, aunque parezca imposible en este momento.
Los Tigres han hecho un gran trabajo. Avanzaron a la Final contra pronósticos y han dado una lección sobre cómo manejar un equipo de modesto presupuesto y mucha juventud.
No obstante, los Leones son superiores. Tienen un equipo de talento más profundo, bien reforzado y que ha sido bien manejado por Sandor Guido, su mentor en estado de gracia.
A los Leones se les llegó a visualizar como finalistas ante los Gigantes de Rivas, quienes parecían el mejor equipo disponible, hasta antes de desinflarse en la recta final del torneo.
Pero los Tigres han dado la cara, se burlaron de los pronósticos y han sido protagonistas respetables, con unos fanáticos que los han alentado durante todo el camino.
Ahora les toca asumir la más grande de las tareas, y es tratar de darle vuelta a una serie que pierden 1-3. Eso no es fácil y lo más probable es que no puedan conseguirlo.
Sin embargo, seguro en Chinandega sienten mucho orgullo por un equipo que ha sido combativo todo el año y que incluso ahora, situado contra la pared, es visto con respeto hasta por estos Leones que se pusieron más bravos.
Edgard Rodríguez en Twitter: @EdgardR