CONTENIDO EXCLUSIVO.
CONTENIDO EXCLUSIVO.Nació en León, pero fue criado en Managua. Desde pequeño soñaba con ser periodista y está de regreso en Nicaragua luego de 13 meses de exilio para seguir ejerciendo su profesión.
¿Cómo te describirías en tres adjetivos?
Espontáneo, seguro y ensimismado, cuando estoy en una multitud o cuando las personas están muy pendientes de mí.
¿Sabés por qué te pusieron tu nombre?
Mi madre dice que fue por Borís Yeltsin de la Unión Soviética.
¿Cuál fue tu juguete preferido cuando eras pequeño?
Las chibolas (canicas) y los trompos, aunque no sabía usarlos (ríe).
¿Qué animal te gustaría ser?
Un ave fénix.
Música favorita para bailar.
Banda.
¿Algún talento oculto?
Simulo que canto (ríe).
¿Qué comida no podés rechazar?
La sopa de mondongo.
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¿Qué es lo más loco que has hecho?
Bañarme en una playa a las 2:00 de la madrugada (ríe).
¿Creés en Dios?
Creo en Dios. Yo sé que respiro gracias a Dios y todo lo que tengo es gracias a Dios.
¿Has estado a punto de morir?
Sí. El 28 de mayo, en una gasolinera de Managua, un antimotín me puso un arma en el pecho y me dijo “te vas a morir, hijuep…”.
¿A qué personaje te habría gustado entrevistar?
A doña Violeta Barrios porque me parece una persona muy respetable, aunque sé que por su condición de salud ya no la puedo entrevistar.
¿Qué ha sido para vos lo más duro en estos meses de crisis?
Irme del país.
Un mensaje para los nicaragüenses.
Que no vamos a terminar aquí. Los nicaragüenses vamos a salir adelante.