El ataque que sufrieron periodistas independientes mientras daban cobertura a la misa de cuerpo presente del poeta Ernesto Cardenal este martes, y de los cuales, los más afectados fueron Leonor Álvarez de LA PRENSA; Hans Lawrence de Nicaragua Investiga y David Quintana, del portal Boletin Ecológico, fue dirigido contra el gremio por parte de las turbas orteguistas, consideran los comunicadores que recibieron golpes, insultos, patadas y fueron robados.
Lawrence, de 21 años, fue el más golpeado de los tres colegas. Estaba filmando el asedio de las turbas orteguistas cuando uno de los hombres lo sujetó de la mano, él se identificó como periodista, pero eso no importó; poco a poco, la turba empezó a rodearlo junto a Álvarez, en seguida, corrieron por refugio en la casa cural. Sin embargo, los portones del lugar fueron violentados por los orteguistas, quienes se lanzaron sobre los periodistas. A Álvarez la patearon, arañaron y robaron su celular, mientras, otro grupo se dedicó a repartir golpes contra Lawrence.
Él solo logró cubrir su cabeza con sus manos para evitar que lo golpearan, ya que padece epilepsia desde los 17 años y sabe que los golpes podrían afectarle mucho. Sin embargo, los intentos fueron en vano, Lawrence tiene una marca roja en la sien derecha, huella de la violencia que recibió.
Recuerda que los hombres le gritaban “delen”, “delen”, “la mochila”, “la mochila”, y él solo trataba de safarse, de no haberlo hecho, cree que no hubiesen parado de agredirlo. Los golpes que recibió le provocaron que vomitara sangre, no podía caminar y se sentía mareado, por lo que fue llevado al hospital Vivian Pellas junto con Quintana, quien también alcanzó los golpes.
En el centro médico le hicieron varias radiografías y ultrasonido para descartar fractura u otros daños a los órganos. En general, se encuentra bien, pero muy adolorido y sigue vomitando, esta condición puede deberse a su presión alta o bien, puede ser un aura de ataque epiléptico, explicó.
Por su parte, Quintana relató que unos siete hombres lo agredieron. Le robaron sus dos celulares, su tarjeta de ahorro que hasta usaron y le gritaban groserías. El que dirgía la agresión le dio un puntapié en su sien izquierda y le dijo que eso le pasaba por lo que estaba informando, por lo que hablaba.
Quintana explicó que saben que los ataque están dirigidos hacia el gremio, y lo que pasó es una oportunidad para denunciar “que en Nicaragua la situación no está normal porque están golpeando a la prensa independiente que solo tiene como arma un lapicero, una grabadora y un celular para hacer su trabajo, que para eso estudiamos, que es hacer periodismo, que es preguntar y que es llevar información a la población a como debe de ser”, dijo.
Por su parte, Álvarez expresó que los ataque contra periodistas es un poco de todo, las turbas tienen la orden de atacar a cualquier, y agreden a los periodistas críticos porque nadie los va a judicializar. “Las agresiones a los periodistas y también a los ciudadanos pasan porque el gobierno las permite, porque el gobierno no castiga a quienes agreden por ser periodistas, por pensar diferente… al final, ellos tienen una orden de agredir a quien se les de la gana porque no van a tener consecuencias”, sostuvo.
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Cardenal lamenta violencia
El cardenal Leopoldo Brenes lamentó lo que sucedió en el acto religioso en honor al sacerdote Ernesto Cardenal, en el que simpatizantes orteguistas agredieron a otras personas. Dijo que dicha situación debería invitar a la reflexión, en primer lugar, en respetar el templo, y de manera especial, hacia las personas que puedan estar dentro.
Agregó que “invitaría a que no actuemos con acciones que vienen desde el hígado, sino desde la razón, yo creo que la violencia genera violencia y esto en este momento no abona nada a la pacificación y a la normalización del país, como todos lo queremos”, expresó.
Condena internacional
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) condenó la violencia impartida por fanáticos del gobierno este martes en la Catedral. Lo calificó como “un ataque a su memoria y a libertades de reunión, religiosa y de expresión en Nicaragua”. A su vez, urgió al Estado a restablecer dichas libertades.
Tanto la CIDH como la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, se pronunciaron por las agresiones contra los periodistas. OACNUDH instó al Gobierno de Nicaragua a cumplir con su obligación de garantizar el trabajo periodístico, fundamental en el marco del ejercicio de la libertad de expresión y del derecho a la información.