Las organizaciones opositoras Alianza Cívica y Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) enviaron este miércoles una carta al secretario general de la Organización de Estados Americanos, (OEA), Luis Almagro, en la que le solicitan el apoyo de su oficina y el de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), para que llamen al régimen de Daniel Ortega a adoptar las recomendaciones de las entidades especializada para contener y desacelerar la transmisión del nuevo coronavirus (Covid-19), siendo la principal, evitar las convocatorias a marchas públicas.
El coronavirus es una enfermedad respiratoria, que ya es considerada una pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Varios eventos internacionales, conciertos y encuentros mundiales se han cancelado por el riesgo al contagio. Además, varios países han cerrado sus fronteras para evitar la propagación de la pandemia.
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Mientras que “el Gobierno promueve marchas de supuesto apoyo a sus políticas, que contravienen las recomendaciones de evitar concentraciones, hechas públicas por la OPS/OMS y aplicadas por las autoridades de muchos países que hoy enfrentan con responsabilidad los riesgos de esta pandemia. En un desafío temerario y de abierto desprecio por la salud pública, el Gobierno de Ortega promueve en estos días ferias comerciales y actividades festivas de participación masiva en un afán de aparentar normalidad”, expresan la carta dirigida a Almagro, en su carácter de Secretario General de la OEA.
En la misiva, los opositores expresan “profunda preocupación por la crisis sanitaria a que el gobierno de Nicaragua está exponiendo a su población durante la actual pandemia COVID- 19, agregado a grave crisis humanitaria que este pueblo sufre desde hace casi dos años”.
También se quejan de la representación de la OPS en Nicaragua, porque consideran que “no ha mostrado claridad ni fuerza en trasmitir las recomendaciones de su sede, y su apoyo público a las pocas acciones preventivas del Gobierno, ha sido tomado desde medios oficialistas como endoso a la política del gobierno”.
En ese sentido, los opositores denuncian que “el gobierno de Ortega promueve imprudentemente lo contrario” del llamado de la Organización Panamericana de la Salud a los gobiernos de la región.
Hacen ver que el Sistema de Integración Centroamericana (SICA) ha puesto en evidencia que el Gobierno de Nicaragua es el único en la región que ha incumplido las alertas/acciones recomendadas al respecto.
Los opositores solicitan al Secretario General del a OEA “trasmitir esta preocupación a las y los honorables embajadoras y embajadores permanentes ante la OEA”, a “las y los cancilleres de los Estados miembros”, así como a la directora de la Organización Panamericana de la Salud”.
Ortega buscaría protegerse de las sanciones
La Alianza y la Unidad advirtieron que este “teatro de normalidad parece calcular que una eventual crisis sanitaria en Nicaragua protegería al Gobierno de Ortega de nuevas sanciones, que la comunidad internacional evitaría decretar para no afectar a la población nicaragüense, pero que en términos prácticos ayudarían a Ortega a mantener impunes las violaciones de derechos humanos cometidas, y a mantener sin consecuencias la ruptura del orden democrático que hasta hoy prevalece en Nicaragua.
Recomendaciones de la OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió algunas recomendaciones para los lugares donde se han registrado el Covid-19, que son para pausar o detener el brote. Las recomendaciones son lavarse las manos a fondo; mantenerse una distancia mínima de un metro (3 pies) entre usted y cualquier persona que tosa o estornude; evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca, porque en caso tener las manos contaminadas se puede transferir el virus a los ojos, nariz o boca y de ahí entrar al cuerpo.