Pese a la demanda de varios jugadores de suspender la Liga Primera como medida de precaución ante la pandemia del coronavirus, los juegos continuaron anoche, pero esta vez sin público, a puerta cerrada. Como medida de protección, los jugadores del equipo Diriangén posaron con mascarillas y guantes previo al duelo que ganaron 2-0 al Club Deportivo Ocotal en su casa, en el Estadio Cacique Diriangén.
Diriangén es el único equipo que abierta y valientemente ha pedido detener el torneo, de manera momentánea, como medida de protección para los jugadores, fanáticos y sus propias familias.
Anoche jugaron en casa y previo al encuentro emitieron un comunicado en donde manifestaban su decisión de jugar la jornada 10.
“Tras una reunión entre todos los miembros del equipo y para evitar sanciones deportivas graves contenidas en nuestras bases de competencia, se ha decidido disputar el partido correspondiente a la jornada 10 del Clausura 2020 a puerta cerrada como lo estipuló la Asociación Nicaragüense de Clubes de Futbol (ANCF), entidad organizadora de la Liga Primera. El encuentro se realizará con un estricto proceso sanitario que cuidará la integridad física de los protagonistas del partido y operadores del mismo. Cabe señalar que nuestra institución sigue firme en su posición de suspender el campeonato hasta que haya condiciones seguras para reanudarlo”, se lee en el comunicado.
Diriangén sigue de líder gracias al par de goles del uruguayo Bernardo Laureiro. Art Jalapa se impuso a Walter Ferretti 2-0 con tantos de Gabriel Coelho y Edry Centeno, mientras que Real Estelí superó 4-0 a Real Madriz FC con goles de Brandon Ayerdis, Luis Acuña y par de dianas de Taufic Guarch.
Hasta ayer, Nicaragua contabilizaba dos casos positivos de coronavirus y uno sospechoso.
Fue la Liga Primera que ayer decidió que se jugara a puerta cerrada en la jornada 10 este fin de semana.