La Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) emitió un comunicado este martes, poniéndose a la disposición de la Diócesis de Matagalpa, para apoyar la iniciativa del obispo Rolando Álvarez, de instalar seis Centros de Prevención Médica y un Call Center en ese departamento, pese a la prohibición del Ministerio de Salud (Minsa).
En cambio, el organismo económico y de desarrollo social calificó como “un acto irresponsable e inhumano” la decisión del Minsa de prohibir la iniciativa de la Diócesis de Matagalpa, para ayudar a la población a prevenir o disminuir el COVID-19.
“Estamos a disposición de la Diócesis de Matagalpa para apoyar esta iniciativa, así
como las iniciativas que contribuyan a la labor humanitaria para afrontar el Covid-19. Es urgente que todos los sectores, lejos de obstaculizar iniciativas positivas, nos unamos y apoyemos proyectos que velan por la salud de las y los nicaragüenses, especialmente por los más vulnerables y desprotegidos”, manifestó Funides en un comunicado emitido este martes 7 de abril.
El domingo 5 de abril, el obispo Álvarez anunció la implementación de un proyecto diocesano para prevenir o disminuir el riesgo de contagio por coronavirus en los habitantes de Matagalpa, con la colaboración de 15 médicos matagalpinos.
Pocas horas después, el Minsa le notificó al obispo de Matagalpa que no podía realizar el proyecto Centros de Prevención Médica (CPM) que incluía un sistema de call center. Médicos voluntarios y comunicadores participarían en el proyecto para ayudar en la prevención del contagio del nuevo coronavirus, afin de evitar la propagación de la pandemia.
El coronavirus es una enfermedad respiratoria, considerada una pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Varios eventos internacionales, conciertos y encuentros mundiales se han cancelado por el riesgo al contagio. Además, varios países han cerrado sus fronteras para evitar la propagación de la pandemia. También llaman a la población a no salir de sus casas, han suspendido las clases escolares, impuesto toques de queda, entre otras medidas.
Mientras en Nicaragua, el régimen de Daniel Ortega no ha implementado ninguna medida de contención nacional y más bien promueve eventos recreativos y llama a la población a seguir con su vida normal.