Un gran número de aficionados asistieron a las graderías de los estadios Roberto Clemente de Masaya, Rufo Marín de Estelí, Efraín Tejerino de Chinandega y Yamil Ríos Ugarte de Rivas para ver este viernes por la noche a sus equipos en el inicio de la segunda vuelta del Campeonato Nacional de Beisbol de Primera. Las imágenes probablemente darán la vuelta al mundo porque reflejan imprudencia o ignorancia al contagio de Covid-19, que registra de momento nueve casos positivos y una persona fallecida en Nicaragua.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) destacó entre sus medidas de prevención el distanciamiento social para evitar la propagación del contagio. Sin embargo, algunos hacen caso omiso y exponen su salud y la de sus familias como los aficionados del San Fernando y Rivas. En las series entre Bóer y Carazo en Managua, Nueva Segovia ante Costa Caribe en Puerto Cabezas no se observaron imágenes similares de aficionados. Mientras, Chinandega ante los Dantos, según sondeo de LA PRENSA, se estimó más de dos mil fanáticos en el Efraín Tijerino.
El futbol de primer nivel se juega a puerta cerrada, pero eso no impidió que algunos aficionados norteños se expongan de la misma manera. La Liga Primera aseguró tomar cartas en el asunto. En caso del beisbol, es diferente. Carlos Reyes, comisionado del beisbol, explicó en diferentes momentos que la actividad se mantiene con normalidad hasta que el Ministerio de Salud les indique lo contrario. Las series de tres partidos entre estos conjuntos continuarán el fin de semana en las casas de los conjuntos visitantes.