Fernando Villalpando venía de cuatro meses sin jugar producto de una lesión. Aceptó probar en un futbol desconocido para él con poco ritmo de juego y sin la paz mental necesaria para afrontar el reto, pero el cambio de ambiente y determinación lo llevó a recuperar en Nicaragua todo lo que había perdido en México convirtiéndose en la máximo goleador (10) de la Liga Primera.
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Su nombre nunca resaltó entre los principales aspirantes porque estaba llegando al futbol nacional y era prácticamente desconocido. Por delante estaban jugadores destacados de la Liga como el español Pablo Gállego, quien terminó segundo, el mexicano Carlos Félix, quien ha sido campeón goleador en 2018 y 2019, el azteca Taufic Guarch —cinco tantos—, quien por su pasado llegó como la principal atracción, y Ulises Rayo (7), quien ha peleado la bota los últimos torneos.
Villalpando llegó buscando nuevos aires, un nuevo comienzo para su vida deportiva, sin embargo para lograrlo tuvo que perder para después ganar: debió renunciar a la demanda laboral interpuesta a su anterior club en México para poder inscribirse con el Ferretti donde volvió a recuperar la confianza en el área, esa que le permitió ser líder rompe-redes (28 tantos) de 2018 en la Tercera División de México.
El mexicano arribó con bajo perfil pero silenciosamente se dio a conocer con sus goles dejando huellas de la Liga Primera. Es el cuarto azteca campeón goleador en la historia de Liga Primera, tras Gregorio Torres en la temporada 2016-17 con el Real Estelí, Mauricio Castañeada con el Madriz en el Apertura 2017 y Carlos Félix, actual jugador del Managua FC, quien lo consiguió en el Clausura 2018 con Juventus FC y Apertura 2019con los Leones Azules.
Además logró la bota de goleo en su primera participación como sus otros compatriotas, Torres y Castañeda, más el español Daniel Cadena en la temporada 2013-14, el hondureño Armando Cruz en la campaña 2009-10, el colombiano Marlon Barrios en el campeonato 2014-15 y el brasileño Lucas Dos Santos en el Apertura 2018.
También es el primer jugador del Ferretti en conseguir una corona de goleo en seis años, tras Cadena (2013-14), y el cuarto en la historia de torneos cortos (2003 en adelante) junto con los hondureños Cesar Salandía (2008-09) y Armando Cruz (2009-10). “No dije después un principio venía a marcar cierta cantidad de goles, no sabía que iba hacer tantos, de lo que sí estaba seguro era de dar el máximo de mí para ser destacado y ayudar a mi equipo que sin ellos no lo hubiera logrado nada”.