Desde que se reportó el primer caso del nuevo coronavirus SARS-CoV-2 en Nicaragua, los pobladores tomaron rápidamente medidas de prevención para evitar el contagio y enfermarse de Covid-19. Ante la falta de políticas del gobierno de Daniel Ortega por la pandemia, algunos decidieron autoaislarse, evitar aglomeraciones y cumplir con las medidas de higiene recomendadas por las Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sin embargo, los pobladores acuden a los mercados, supermercados o ventas ambulantes para abastecerse de alimentos, compran comida en las calles o hacen pedidos a domicilio de alimentos. La Organización Mundial de la Salud aseguró recientemente que no hay estudios que demuestren que el Covid-19 pueda transmitirse a través de los alimentos o de los envases de los alimentos; y recordó que el contagio del virus ocurre por contacto directo de las personas a través de las gotas que son expulsadas al toser o estornudar por alguien que tiene el virus.
En el caso de ingerir un alimento contaminado con el nuevo coronavirus, el epidemiólogo Leonel Argüello explica que la persona no se va a enfermar de Covid-19, pues el virus entra a los pulmones por la vía respiratoria y no por la vía intestinal; y agrega que las vías de transmisión específicas son la vía respiratoria y el contacto con una superficie contaminada.
En un ejemplo sencillo, Arguello refiere que así como una persona ingresa por una puerta a una casa, el coronavirus tiene una entrada específica en el cuerpo humano. “Si vos tenés un alimento que está contaminado con el virus, vos agarrás el alimento te lo metés a la boca, los masticás, te lo comes y te lo tragás, no entra en esa puerta (las vías respiratorias), sino que entra en la ventana (es decir, el sistema digestivo)”.
Al suceder esto, aclara que el virus irá al tubo digestivo y la persona lo defecará sin haberse contagiado de la enfermedad. En tanto, el virus quedará en las heces fecales pero no podrá infectar a alguien más. Igual sucede con la orina, explica Argüello. “La particularidad (del virus) es que afecta primero a los pulmones y después a los otros órganos”, agrega.
Tanto la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) como la autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) aseguran que no hay evidencias que vinculen a los alimentos o sus envases en la transmisión del coronavirus.
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Aunque tampoco hay estudios de que los envases de los alimentos transmitan el Covid-19, el epidemiólogo advierte que el contagio del virus puede ocurrir si una persona sana toca un envase que haya sido manipulado por otra personas infectada pues el virus permanece por varios días en materiales como el plástico. La OMS asegura que el SARS-CoV-2 puede permanecer hasta 72 horas en el plástico y el acero inoxidable, 4 horas en el cobre y 24 horas en el cartón.
Ante esto, Argüello recomienda lavarse continuamente las manos con agua y jabón, evitar tocarse la cara con las manos sucias y lavar los envases de los alimentos con agua y jabón. Limpiar los alimentos, separar los alimentos crudos de los alimentos preparados y desinfectar con agua y jabón o con cloro el lugar donde se colocarán los alimentos ya limpios. Recomienda, además, limpiar las latas pues pueden producirse otras enfermedades como la leptospirosis o la hepatitis A.
“Vos tenés siempre que estar consciente de que el virus está en todos lados por una razón muy sencilla: yo meto aire al respirar y saco aire, al sacar estoy sacando millones de virus y esos virus los estoy tirando por donde yo ando respirando; y yo respiro mínimo 14 veces por minuto”, dice el epidemiólogo.
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Recomendaciones para manipular los alimentos
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos ha emitido recomendaciones sobre la manipulación de los alimentos:
– Enjuague las frutas y vegetales frescos con agua de la llave, incluyendo los que tienen piel o cascara que no se come. Frótelos con un cepillo limpio. Para los productos enlatados, recuerde limpiar la tapa antes de abrirla.
-Cuando desempaque sus comestibles, refrigere o congele la carne, el pollo, los huevos, los mariscos y otros alimentos perecederos como la lechuga, las hierbas dentro de 2 horas de haberlos comprado.
-Limpie y desinfecte regularmente los mostradores de la cocina usando un producto desinfectante disponible en el mercado o una solución casera hecha con 5 cucharadas (1/3 taza) de blanqueador de cloro liquido sin fragancia en un 1 galón de agua, o 4 cucharaditas de blanqueador en un cuarto de agua.
-Siempre tenga en cuenta los 4 pasos claves de la seguridad alimenticia – limpiar, separar, cocinar y enfriar.
Comidas por delivery
El autoaislamiento también ha llevado a los dueños de negocios a ofrecer su servicio de comida por delivery y a los mismos pobladores a solicitar el servicio para evitar exponerse al virus en los locales. Sobre esta situación, Argüello asegura que se debe limpiar el envase donde vienen los alimentos o retirar los mismos y ponerlos en un plato y lavarse las manos con agua y jabón antes de ingerirlos. Por ejemplo, en el caso de las pizzas hay que sacarles de la caja de cartón en la que suelen empacarse.
Sobre si hay que calentar nuevamente los alimentos al pedirlos a domicilio, el especialista refiere que no es necesario porque si está el virus, éste no se va a morir. En el caso de las comidas congeladas, el procedimiento es igual y tomando en cuenta que estas se pueden descomponer con más facilidad.
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Argüello recuerda que una comida contaminada puede producir una intoxicación alimentaria, con síntomas como vómito, diarrea; así como parásitos.
La Organización Mundial de la Salud ha llamado a las empresas alimentarias a tomar las estrictas medidas de higiene, distanciamiento físico y medidas de saneamiento en las etapas de la elaboración, producción y comercialización de los alimentos. Además los insta a utilizar los equipos de protección para evitar o reducir el riesgo de que contaminen la superficie de los alimentos o los envases con el virus.