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Asensio regresó a lo grande. LAPRENSA/CORTESÍA REAL MADRID FC

El Real Madrid muestra más cara de campeón que el Barcelona

Si el aficionado quería solidez la hubo, inteligencia sobró, colmillo asesino de goleador existió y sobretodo una magia estilo Houdini con Benzema en el tercer gol

Una tarea en casa de alta complejidad fue descifrada por el Real Madrid. Goleó al Valencia 3-0, pero más allá de los goles es la manera en la que sucedió: un equipo fuerte atrás, sin muchos rodeos para finalizar las jugadas, con la capacidad de de ejecutar en medio de presión y con un banquillo de estrellas que giran el destino de un encuentro. Si el aficionado quería solidez la hubo, inteligencia sobró, colmillo asesino de goleador existió, y sobretodo, una magia estilo Houdini con Benzema en el tercer gol. Este equipo así es capaz de todo y estando dos puntos atrás del Barcelona pone a temblar a los culés, hechos una montaña rusa en rendimiento.

Nadie creía que sería sencillo. El Valencia de la primera parte complicó a la tropa de Zidane. Fue un rival honorable. No tenía la pelota, pero mordía como un pitbull en los contragolpes. Aunque el Madrid arañó primero en dos ocasiones con Hazard tras recibir un pase de Benzema y luego un disparo de media distancia de Tony Kroos que Cillessen rechazó. El arquero se colocaba la capa de héroe. La respuesta fue inmediata en una réplica de balón largo a Rodrigo. Mal parada la defensa blanca, el delantero llegó a verle cara a Courtois y después de jalar el gatillo el balón terminó muy cruzado, haciendo temblar el poste. Al Madrid le costaba romper líneas y se refugiaba en el disparo de media distancia. Así lo intentó una y otra vez. Rodrigo volvió a la carga y dejó anonadados con el que era el primer gol al minuto 20, sin embargo, el VAR lo anuló entre polémicas por Maxi Gómez. Legalmente estuvo bien anulado por intentar participar en la jugada causando un desvío.

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Los fuegos artificiales se reservaron para la segunda parte. Tan solo Gameiro tenía 20 segundos de haber entrado al campo y erró en una entrega en la media cancha. Esos obsequios para el Madrid son como jugar a una ruleta rusa con todos los cartuchos cargados. Hazard avanzó, entregó a Modric, quien luego regresó el esférico y cayendo al suelo el belga asistió a Benzema. 61 minutos de juego y las puertas del infiernos al Valencia se le había abierto.  Luego volvió la sociedad Benzema y Hazard pero se le desconfiguró la mira.

Y en un regreso triunfal Asensio estuvo en un gran nivel tras haberse roto el ligamento cruzado el año pasado. 30 segundos en el campo y recibió un centro de Mendy, el mallorquín metió la izquierda de una manera sublime, le dio con el interior y batió a Cillessen. El 2-0 era una sentencia de muerte, pero al 84′ antes de caer el telón otra vez apareció Benzema. Robo desde la defensa de Casemiro, proyección y cambio de juego de Kroos, recepción y asistencia de Asensio y Benzema hizo la magia. Sin que el balón tocara el césped lo pasó con su derecha a su pierna izquierda y como si el tiempo se detuviera tiró el latigazo a la escuadra.

Terminó el juego con una sensación que la Liga le pertenece más al Madrid que al Barcelona, aún cuando es líder. Los blancos muestran cara de campeón y el Barsa de terror por lo visto.

Deportes Barcelona Real Madrid archivo

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