Byron Bonilla tuvo una dura infancia en el barrio Las Pastoras de Costa Rica. El granadino proviene de una familia humilde que se esforzó para salir adelante. En la adolescencia careció de muchas cosas pero en el camino encontró personas que le tendieron la mano como Kenneth Centeno Porras, un amigo de la infancia que lo ayudó con zapatos para jugar, ropa y comida.
Puede interesarte: La historia de Byron Bonilla: sufrió discriminación de niño y 16 años después alcanza la élite del futbol costarricense
“Él murió hace tres años. Siempre me ayudó sin pedirle nada, como si sabía lo que necesitaba. Y una de las razones por las cuales fiché por Saprissa fue pensando que le hubiera gustado así porque era muy saprissista”, afirmó el nicaragüense hace un año cuando llegó al Saprissa.
Un día después de convertirse en el primer campeón nicaragüense en el futbol costarricense, Bonilla se acordó de un su amigo con emotivo mensaje en Facebook y le dio gracias por todo lo que hizo por él. “Hoy haces falta , hoy te quería ver celebrando conmigo. Hoy que quiero darte un abrazo y enseñarte la medalla que me ayudaste a ganar, pero no estás”, publicó Bonilla