Martha, Domitila, Antonia, Tatiana, Dolores son cinco de las 35 mujeres que han sido víctimas de femicidio en el primer semestre del año 2020, según Católicas por el Derecho a Decidir, que también señala que el actual contexto de pandemia de Covid-19 vulnera a las mujeres, ya que deben quedarse en casa, uno de los lugares más inseguros en términos de violencia y donde 18 de estos casos han sido en el ámbito privado.
Martha Flores, de Católicas, destaca que los femicidios en grado de frustración se han disparado en este año. En los primeros seis meses de 2019 se contabilizaron 38, pero ahora son 45, es decir, que siete mujeres más han estado en riesgo de morir por la violencia machista, explica.
Mientras el régimen orteguista sigue inaugurando Comisarías de la Mujer, como un medio para atender a las víctimas de cualquier tipo de violencia; sin embargo, los grupos feministas ya han denunciado que estas no funcionan solo con nueva infraestuctura, sino con personal capacitado y sensibilizado, que no revictimicen a las mujeres, y que facilite la impartición de justicia.
De acuerdo con el informe, las mujeres en el grupo de edad de 19 a 25 años, seguido de las de 35 a 50 años, han sido las principales víctimas de los delitos de femicidio. Sin embargo, Católicas también identificó cinco casos de mujeres asesinadas que tenían de 12 a 18 años, es decir, eran menores de edad. Por su parte, la enlace de la Red de Mujeres contra la Violencia, Maryce Mejía, explica que 18 femicidios ocurrieron en el ámbito privado y 17 en el ámbito público, es decir, que ningún lugar es seguro para las mujeres y las niñas.
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“Estos datos son un panorama de la grave situación de derechos de las mujeres en Nicaragua, pero más que números son vidas destruidas”, expresa Mejía. Agrega que en este período es claro que ha habido un repunte de los niveles de violencia contra las mujeres y las niñas, sin ninguna protección y pronunciamiento del Estado al respecto.
“Estas cifras siguen siendo un subregistro puesto que en las comunidades hay violencia a diario y se quedan en silencio porque las víctimas no denuncian por miedo y desconfianza a las instituciones del Estado, y porque el sistema de justicia cansa y hace retroceder a las mujeres en los procesos de denucia”, expresó la defensora.
Flores indica que así como ha ocurrido con la violencia política, que ha facilitado el actuar de los abusadores, hoy en día se están aprovechando también del Covid-19, ya que las mujeres se cuidan de los contagios en sus casas. Según el informe 10 femicidios fueron propinados por las parejas de las víctimas y cuatro por exparejas. Otros 14 están relacionados a desconocidos. La mayoría han sido ejecutados por armas de fuego.
Violencia en el territorio nacional
De estos 35 femicidios 5 ocurrieron en Matagalpa, seguido de Managua, 6 casos y el Caribe Norte con 4 casos. En Chinandega y Granada ocurrieron tres respectivamente. Contrario a meses anteriores, el departamento de Jinotega, uno de los más comunes donde se reportan hechos de violencia machista, registra un femicidio. Tres ocurrieron en el exterior: 2 en Costa Rica y uno en El Salvador.
Estas vidas arrebatadas han dejado a 47 niños, niñas y adolescentes huérfanos, según el informe, otro de los datos que el Estado sigue invisibilizando, como lo hace con los femicidios.
El difícil acceso a la justicia
Pese a que el régimen orteguista asegura encargarse del problema de la violencia contra la mujer, el 13 de mayo el Ministerio de Gobernación liberó a unos 514 privados de libertad condenados por violaciones agravadas a menores de 14 años, abusadores sexuales, proxenetas, explotadores sexuales y femicidas en todo el país. Ellos fueron parte de los 2,815 reos comunes que fueron puestos en libertad.
La acción fue considerada como un retroceso en materia legal por parte de los colectivos feministas, ya que esos agresores no habían cumplido su condena. De acuerdo con estas últimas estadísticas de femicidios y en grado de frustración, 11 están en proceso judicial, 8 siguen prófugos, 4 están impunes, 4 han sido sentenciados y 3 de ellos se suicidaron.