Profesionales de la salud de Nicaragua hicieron público un tercer pronunciamiento referente a la pandemia del Covid-19 en el país, en donde muestran su preocupación por el avance del virus, demandan al régimen de Daniel Ortega priorizar la salud del pueblo y enumeran, lo que a su criterio son, los principales problemas en el contexto de la crisis sanitaria.
La transmisión comunitaria del Covid-19 y sin medidas y políticas de contención y mitigación a nivel nacional, debilitamiento del sistema de salud pública, aumento de personas en automedicación, centralización y falta de acceso a pruebas, y por último, la continuidad de la promoción de actividades masivas y la insistencia desde el Ministerio de Educación con las clases presenciales, son “los principales problemas que amenazan nuestra seguridad sanitaria”, de acuerdo al documento.
“Nicaragua necesita reconocer su frágil situación sanitaria ante su pueblo y el mundo, insistimos en la necesidad de dar a conocer los datos reales de la pandemia, es mandatorio para el gobierno de Nicaragua seguir las recomendaciones de la OPS/OMS, así como asumir las medidas sugeridas por el SICA a nivel centroamericano”, expresan los profesionales de la salud en el último párrafo de este tercer pronunciamiento, con fecha del 2 de julio.
El primer caso positivo del nuevo coronavirus en Nicaragua fue confirmado por las autoridades nacionales el pasado 18 de marzo y dos meses después, basado en las mismas cifras oficiales del Ministerio de Salud (Minsa), el país entró en la curva exponencial. Continúa y es ante tal situación que los médicos alzan la voz, mostrando valentía, por las acciones represivas a la que están expuestos.
Por qué los cinco puntos
La transmisión comunitaria que hace referencia el pronunciamiento, es porque desde hace semanas el país está en esa fase de contagios y no existen medidas desde el Estado para desacelerar la curva exponencial. En el segundo punto, donde aborda el debilitamiento del sistema de salud, es por la baja en el cuerpo médico a causa de enfermedad y la ola de despidos de personal sanitario.
En el caso del crecimiento de pacientes en automedicación, los médicos lo abordan por el riesgo que representa en resultados fatales. En cuanto a la centralización y falta de acceso a la prueba de Covid-19 “deja sin herramientas diagnóstica a todo el sistema de salud de la nación.
LAPRENSA/J.FLORES
Como último punto está la promoción de eventos masivos y el regreso a clases presenciales en la educación pública, yendo en contra de las recomendaciones de organismos internacionales de salud cuando se está en fase de transmisión comunitaria.
Se mantienen entierros exprés
Luego de las primeras muertes por Covid-19, en diferentes ciudades del país empezaron a verse y ser frecuentes los entierros exprés, desarrollados con el protocolo para los casos de coronavirus. Estos consisten en inhumaciones inmediatas, sin abrir los ataúdes y los familiares presenciando el sepelio a una distancia prudente. Muchos de estos con sepultureros utilizando trajes especiales de protección. Esto sigue vigente a más de tres meses de confirmarse el primer caso de Covid-19, exponiendo la emergencia sanitaria.
Asimismo, el régimen ha emprendido una persecución contra el personal médico que ha exigido políticas encaminadas a disminuir el contagio en la población y en los mismos doctores, quienes están en la primera línea. Esto ha desembocado en despidos de doctores del sistema de salud público, pese a que siguen en aumento los contagios y fallecidos.
En la última conferencia de prensa del Minsa, realizada el pasado martes 30 de junio, se reveló que la cantidad total de casos positivos llegó a 2,519, con 83 fallecidos.
Cifras del Minsa
A partir de la segunda quincena de mayo la cifra de contagios se disparó en Nicaragua, esto según información del Ministerio de Salud (Minsa). Pasó de 25 a 279 contagios. Este ritmo acelerado se ha mantenido hasta el 30 de junio, día en que se brindó el último informe oficial. Por otro lado, continúan los entierros exprés y los cementerios experimentan un movimiento inusual con la cantidad de servicios fúnebres.
Con las llamadas telefónicas
El hospital Alemán Nicaragüense es uno de los seleccionados para atender pacientes sospechosos y confirmados de Covid-19. A este centro llegan traslados, siendo el principal del Roberto Calderón (conocido como Manolo Morales).
Ante esta situación es que durante semanas se mantuvo una larga fila de familiares de pacientes. Llegaban a entregar paquetes con bebidas, galletas y productos de aseo personal, además recibir información del estado de salud de las personas ingresadas.
Pero desde hace semanas las autoridades sanitarias decidieron suspender las notificaciones de forma personal y las pasaron vía telefónica, con el propósito de evitar las aglomeraciones y de esa manera aparentar control en la pandemia.
LA PRENSA conoció que las llamadas se realizan todos los días y que estas no duran más de tres minutos.