Representantes de las organizaciones y partidos miembros de la Coalición Nacional llamaron a la presidenta nacional de Ciudadanos por la Libertad (CxL), Kitty Monterrey, a cesar sus descalificaciones hacia la Coalición y responder al llamado de unidad de todos los sectores que se consideran opositores al régimen de Daniel Ortega.
Violeta Granera, del consejo político de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), Luis Fley y José Pallais de Fuerza Democrática Nicaragüense (FDN), Miguel Rosales del Partido Liberal Constitucionalista (PLC) y Carlos Tünnermann, coordinador nacional de la Alianza Cívica, pidieron a Monterrey ser consecuente con la demanda de la mayoría de los ciudadanos que esperan la unidad de toda la oposición.
“Doña Kitty no está apegándose a la ralidad de la Coalición. La invitamos a que se sume y no esté con esas posiciones de un niño malcriado. Nicaragua nos necesita a todos”, dijo el excontra Luis Fley, de FDN.
Granera, de la UNAB, reiteró que “las puertas están abiertas para la unidad tan necesaria” de todos los que quieran “dar la batalla para acabar con el régimen” orteguista.
“El que CxL entre por esa puerta o no, les tocará decidirlo. Posiciones excluyentes y con supuestas morales no caben. Aquí todo el sistema de partidos políticos ha colapsado, hay mucha desconfianza de la población y es una realidad. Pero hay miembros y afiliados en todos los partidos que no comparten las decisiones de las cúpulas. Nunca vamos a poder construir una nueva Nicaragua si de partida tenemos posiciones excluyentes”, expresó Granera.
“Una unidad decente”, dijo Monterrey
Las reacciones responden a que Monterrey ha intensificado sus críticas contra la Coalición Nacional a la que, una vez más, aseguró que al partido CxL no le interesa ser parte.
“Los nicaragüenses debemos unirnos no podemos aceptar más de lo mismo, tengan la certeza de que Ciudadanos por la Libertad si quiere la unidad, pero una unidad decente”, fueron parte de las declaraciones de Monterrey a medios independientes en días pasados.
La presidenta de CxL no ha respondido las llamadas telefónicas ni los mensajes de textos enviados por LA PRENSA.
En las redes oficiales de CxL se han publicado las declaraciones de Monterrey en las que primero afirmó que no buscan la división de la oposición frente a una eventual elecciones contra el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), pero luego, la política sostuvo que no se unirán a la Coalición Nacional.
#Ahora | Kitty Monterrey: "No estamos impulsando una opción paralela, los nicaragüenses nos merecemos algo mejor que lo que está en esa Coalición. No vamos a entrar a la Coalición, somos aliados de la Alianza Cívica."@entrevistascdnn
— Ciudadanos por la Libertad (@CxLibertad) June 30, 2020
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El jurista Tünnermann, de la Alianza Cívica, pidió a Monterrey aclarar lo que entiende por “unidad decente”. “No sé por qué ese calificativo”, dijo Tünnermann quien esperaba que en la reunión que miembros de la AC tendrían con CxL fuesen dadas las explicaciones sobre los ataques. “En la reunión sería bueno que aclare (Monterrey) qué entiende por una unidad decente y las razones que tiene por no sumarse a la Coalición Nacional, qué entiende por una delegación mejor y decente”, consideró Tünnermann.
Rosales, del PLC, valoró que las expresiones de la presidenta de CxL “no debe incomodar a nadie” “porque la Coalición Nacional será lo que merecen los nicaragüenses, hasta que estemos absolutamente todos los que pensamos en Nicaragua, y esto por supuesto que incluye al mismo CXL”.
El Movimiento Campesino se retiró de la Alianza Cívica días previos a la firma de los estatutos de la Coalición opositora. El conflicto se debió a que miembros de la AC pidieron más tiempo para suscribir el documento, aunque finalmente se superó el impasse al dejarse un artículo transitorio que permite modificaciones en el texto para que los temas centrales se decidan por consenso y no por mayoría.
Ciudadanos por la Libertad fueron señalados por Luciano García, de la UNAB de provocar el conflicto en la AC para que fracasara la Coalición Nacional, puesto que el interés de CxL, según García, es ser la casilla en la que participe la oposición en las eventuales elecciones del 2021.
La presidenta de CxL ha negado esas acusaciones, pero mantiene su desagrado a unirse en la Coalición.
“No estamos impulsando una opción paralela, los nicaragüenses nos merecemos algo mejor que lo que está en esa Coalición. No vamos a entrar a la Coalición, somos aliados de la Alianza Cívica”, aseguró Monterrey según publicaciones en las redes del partido que preside.
Ciudadanos por la Libertad es aliado de la Alianza Cívica (AC) donde se agrupan estudiantes, empresarios, productores, las madres de víctimas de la masacre, la Unidad Médica Nicaragüense entre otras organizaciones sociales. Aunque la Alianza Cívica sí integra la Coalición Nacional, de la que es impulsora, sin embargo la presidenta de CxL ha insistido que no su vínculo con la AC no les compromete a ser parte de la gran unidad opositora.
La posición de Monterrey es que la AC debió ser el vehículo en que el resto de organizaciones y partidos políticos opositores se unieran para enfrentar a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
La Coalición está integrada por seite organizaciones, movimiento sociales y partidos políticos que agrupan a más de cien grupos de la sociedad civil, campesinos, productores, afrodescendientes, empresarios, feministas, víctimas de la represión, excarcelados políticos y familiares de asesinados durante las protestas ciudadanas desde abril del 2018.
Está pendiente de que los sectores de estudiantes y jóvenes que lideraron las manifestaciones firmen los estatutos de la Coalición y se integren como organizaciones independientes, aunque este paso se ha complicado porque los jóvenes cuestionan que se les ha desplazado mientras los políticos tradicionales han copado a la Coalición Nacional.