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Zona de Strikes: Juan Oviedo padre también fue un roble

Juan Oviedo padre fue uno de los mejores lanzadores del país a inicios de los años setenta y resultó determinante en los campeonatos para Chinandega

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Cuando se haga el recuento del beisbol chinandegano o del nicaragüense en general, en mayor o menor medida, se va a tener que hacer referencia a Juan Oviedo padre, el “Expreso de El Viejo” según sus más orgullosos seguidores o simplemente “Juan Chica” para sus más cercanos.

Dotado de una contextura física recia y apoyado en disparos de alta velocidad, Juan se abrió su propio camino entre los mejores lanzadores del país y logró brillar en la que se ha denominado la “época de oro” del pitcheo pinolero, la década de los años setenta.

Oviedo actuó en parte de 15 temporadas en Primera División, pero hay dos eventos que ilustran su significado en la historia del Chinandega y es su participación en las finales de 1970 y 1971, cuando su tropa se coronó campeón nacional en años consecutivos.

Aunque había participado en la Liga “Paco Soriano” en 1969 y registrado 2-0 y 0.39, Juan inició con 7-7 y 1.37 en la campaña de 1970 y era quien estaba en la colina, cuando los naranjeros vencieron 5-1 al San Fernando y ganaron el campeonato con Argelio Córdoba al timón.

Oviedo encabezó la liga con 15 victorias y 13 juegos completos en 1971, mientras ponchaba a 149 bateadores en 186 innings y registraba 1.94 en efectividad, en una actuación fantástica, que dicho sea de paso, significó la mejor temporada de su carrera.

No obstante, en la Serie Final, que fue a 12 partidos entre cuatro equipos, Oviedo estuvo todavía mejor. Logró cuatro de los ocho triunfos que necesitó Chinandega (8-4) para conquistar su título de forma consecutiva, dejando en el camino al Flor de Caña, Granada y Bóer-Victoria.

Uno de esos éxitos en la Final, fue un juego sin hit ni carrera que Oviedo le lanzó 10-0 al Bóer el 29 de agosto de 1971. Nueve innings. También dejó en dos hits al Granada para vencerlo 2-1, blanqueó 4-0 al Flor de Caña en una faena de dos hits y de nuevo derrotó 2-1 a los sultanecos.

En este último triunfo sobre los Tiburones, Juan solo cedió un hit y remolcó una de las dos carreras para ganar el partido. La otra la empujó Julio Molina. Nunca sabremos si ese bicampeonato del Chinandega se habría conseguido sin Oviedo sobre la colina, quien se mostró como un “as”.

En ese mismo 1971, Juan hizo la Selección Nacional que fue al Mundial de Cuba. Terminó con 1-1 y 3.75, con 14 ponches en 12 innings. En 1972, tuvo 8-6 y 3.16 a nivel local y una lesión lo dejó fuera del equipo nacional tan famoso y tan venerado en nuestro país.

En 1973 Oviedo registró 10-4 y 1.86 en 130 innings y regresó a la Selección, mientras que en 1974 consiguió marca de 7-2 y lideró la liga en efectividad con 1.40 en 83.1 innings y fue al Mundial de Tampa, Florida, donde cerró con 1-0 y 3.60, tras derrotar a Canadá.

En este 1974, Chinandega conquistó por última vez un título nacional en Primera División, de la mano de Noel Areas, quien se impuso al Estelí de Manuel Antonio Díaz “Copa Castillo”.

Oviedo se sobrepuso a dos temporadas discretas con relación a sus estándares en 1975 (5-7 y 1.53) y 1976 ( 4-6 y 2.44) antes de acumular 11-6 y 2.00 en 1977, ya de vuelta al Chinandega, tras un breve paso por los Búfalos en Managua el año anterior.

Oviedo todavía lanzó con cierta intermitencia en los Pomares, pero lo hizo bien. Utilizado como relevista, tenía poca oportunidad de ganar juegos, pero tuvo efectividades notables: 1.62 en 1980, 1.59 en 1981, 1.96 en 1985 y 0.00 en 4.1 innings en 1986, su año final.

Al momento de su retiro en 1986, lo hizo con balance de 87-64 y 2.18 en 1,265 innings, sumó 766 ponches, 74 juegos completos y bordó 19 blanqueadas, para una carrera de la que puede estar orgulloso. Su hijo del mismo nombre, también escribe su propia historia.

Oviedo padre, quien reside en El Viejo, Chinandega, tiene serios problemas de salud y como muchas de las glorias del deporte nacional, está necesitado de ayuda.

Sigue a Edgard Rodríguez en Twitter: @EdgardR 

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