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Daniel Ortega en su pasada comparecencia por el aniversario de la Fuerza Naval, junto al general Julio César Áviles Castillo, el 13 de agosto 2020. LAPRENSA/ REPRODUCCIÓN.

Ortega desempolva otro megaproyecto: El puerto de aguas profundas de Bluefields

El dictador no se pronunció sobre el riesgo de un rebrote de la pandemia por el nuevo coronavirus, ni la crisis de las líneas aéreas. Su discurso siguió anclado en el pasado, recordando sus viejas vivencias en los años 80

Mientras el país enfrenta crisis económica, pandemia, desempleo, desacuerdo con las líneas aéreas, inseguridad ciudadana y otros males, el dictador Daniel Ortega escapa de esa realidad enterrándose en sus recuerdos de joven comandante de la revolución de los años ochenta. Ortega compareció este jueves para dar un mensaje en ocasión del 40 aniversario de la Fuerza Naval del Ejército, que más bien fue un largo relato de un viaje náutico por la Costa Caribe, allá por 1984.

El analista político, Eliseo Núñez Morales, valoró que Ortega por primera vez se enfrenta a problemas tan complejos que no puede resolverlos por la fuerza de las armas, así que su solución es “esconderse de la realidad”.

“Vemos un Ortega que ha decidido, desde que empezó la crisis del Covid-19, esconderse de la realidad. Muy pocas veces ha salido a decir algo sobre el Covid, tal vez en dos o tres ocasiones durante este período. Pero lo que realmente Ortega está haciendo es un reflejo de que él con su poca formación académica, con su poca capacidad intelectual, no entiende qué es lo que está pasando, no entiende cómo de pronto tiene un problema que no lo puede solucionar matando gente”, dijo el analista.

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Ortega también volvió a desvariar con viejos megaproyectos nunca concretados. Esta vez fue el puerto de aguas profundas en Bluefields, en el Caribe Sur del país, y puentes para unir a comunidades indígenas en el Caribe Norte. Hace exactamente un año, en esta misma fecha y en el mismo marco de aniversario de la Fuerza Naval, Ortega revivió la idea del proyecto del Canal Interoceánico, otro de sus proyectos fallidos.

“Habrá más trabajo para la Fuerza Naval porque ahora estamos avanzando en los estudios para la construcción de un puerto de aguas profundas allá en Bluefields, porque nos hace falta un puerto de aguas profundas en Bluefields, los puertos que tenemos son muy pequeños. El puerto del Bluff es muy pequeño, el puerto de Bilwi es un desembarcadero muy pequeño, no pueden acercarse barcos de grandes calados; el puerto del Rama también es muy pequeño. Nos hace falta un puerto grande en el Caribe. Mientras tanto nosotros compartimos puertos con Costa Rica, Puerto Limón, y también con Honduras, para exportar e importar mercadería…”, dijo Ortega.

Cerca de 200 millones de dólares costaría construir un puerto de aguas profundas en Bluefields, en la Costa Caribe Sur. LAPRENSA/J.GARTH

El proyecto de un puerto de aguas profundas en el Caribe es una promesa que se anunció desde la llegada al poder de Ortega en 2007 y fue hasta 2018 cuando oficialmente se informó de estudios de factibilidad para esa obra.

Según el Plan Anual de Contrataciones (PAC) de ese momento se dispuso de 150.6 millones de córdobas para estas exploraciones, que provienen del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y corresponden a la selección de una firma consultora.

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Y es que para Núñez, otro de los pilares del régimen de Ortega es la “inmensa capacidad de su partido de propagar mentiras”, prometiendo megaproyectos al pueblo.

Núñez además valoró que todos estos años el régimen orteguista se pudo mantener en pie aún con sus erradas decisiones, gracias a la bonanza que dejaron los anteriores gobiernos liberales con todo y los defectos que tuvieron. Sin embargo, la pandemia ha superado a Ortega.

“Ortega agarró un país con la economía saneada, con una deuda externa bajísima, con la capacidad del país de endeudarse. Entonces, no tenés que tener gran capacidad para eso. Hoy que sí enfrenta problemas complejos, se suma a la crisis sociopolítica que no ha podido solucionar más que dispararle a la gente, se encuentra con un enemigo que ahora no lo puede solucionar a balazos, que es el Covid-19”, agregó.

En esta comparecencia, en ocasión del aniversario de la Fuerza Naval, Ortega volvió a aparecer con los tres más altos mandos del Ejército: el sancionado jefe del Ejército de Nicaragua, general Julio César Avilés; el jefe del Estado Mayor, mayor general Bayardo Rodríguez, y el inspector general, mayor general Marvin Corrales, todos con guardando sus medidas de salubridad con tapabocas.

Natalicio de Tomás Borge y Fidel Castro

Ortega también conmemoró el natalicio del comandante Tomas Borge, quien cumpliría 90 años este día, y del dictador cubano Fidel Castro, quien cumpliría 94 años hoy.

Ortega se sumergió en sus recuerdos y comenzó a contar sus visitas a la Costa Caribe, en sus tiempos de comandante en los ochenta. Recordó que Fidel Castro “desde la primera visita a Nicaragua navegó, allá por el río Rama”.

“Anduvo navegando y ya recordamos del comandante Fidel su hazaña, cuando el Gramma embarcaron en México y llegaron a Cuba, un desembarque histórico que dio inicio a esa gran batalla por la libertad de Cuba, que era luchar por la libertad de los pueblos de nuestra América y de los pueblos del mundo”, rememoró Ortega, entre otras historias que contó sobre sus experiencias navegando por ríos de la Costa Caribe Norte.

La última comparecencia de Ortega había sido el pasado 31 de julio cuando realizó una trasmisión pública desde su casa, en compañía de los tres principales altos mandos del Ejército de Nicaragua, con motivo del 41 aniversario de fundación de la Fuerza Aérea del Ejército de Nicaragua. Durante su discurso, no hizo una sola mención del incendio dentro de la Catedral de Managua, provocado por un bomba molotov que lanzó un hombre encapuchado, según testigos.

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Desde que la pandemia del Covid-19 comenzó a azotar Nicaragua en marzo pasado, Ortega y su esposa y cogobernante, Rosario Murillo, mantienen una estricta cuarentena, principalmente Ortega que pocas veces es visto en público.

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