Al menos 9,187 millones de córdobas han dejado de recibir las municipalidades del país en los últimos dos años en concepto de transferencias municipales, tras la decisión del Gobierno de afrontar sus dificultades financieras, como consecuencia de la recesión, quitándole a las alcaldías lo que legalmente les pertenece mediante la Ley de Transferencias Presupuestarias a los Municipios de Nicaragua. La situación empeora por el impacto del coronavirus en las actividades económicas locales.
Entre 2019 y 2020 el Ministerio de Hacienda decidió despojar a las alcaldías del 10 por ciento de los ingresos tributarios que por ley se les debía entregar y en lugar de ello solo les dio el cuatro por ciento, situación que empeora para las municipalidades opositoras a las que se trata con discriminación cada vez que se hace la repartición de este bolsón de recursos proveniente del Presupuesto General de la República de Nicaragua.
En el artículo 5 de dicha ley se estableció: “una partida en el Presupuesto General de la República denominada Transferencia Municipal, cuyos recursos se calcularán en un porcentaje de los ingresos tributarios establecido en la Ley Anual del Presupuesto General de la República, iniciando con un cuatro por ciento (4 por ciento) de los ingresos tributarios del año 2004. El porcentaje se incrementará en al menos un medio por ciento anual (0.5 por ciento), siempre y cuando el Producto Interno Bruto (PIB) haya crecido en al menos un uno por ciento (1 por ciento) en el año anterior, hasta alcanzar como mínimo el diez por ciento (10 por ciento) de los ingresos tributarios en la Ley Anual del Presupuesto General de la República en el año 2010”.
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A criterio del municipalista Gilberto Lindo, hay una violación a la Ley 466 porque desde el 2010 la transferencia alcanzó el 10 por ciento de los ingresos tributarios y eso no debió cambiar de manera caprichosa, aunque el Gobierno lo haya modificado a través de la Ley General de Presupuesto de cada año, pero no reformó la Ley 466.
“Eso significa menor capacidad de servicio a los ciudadanos de esos municipios y por supuesto menos desarrollo, porque esos nueve mil millones que se iban a invertir en el territorio nacional dejan de invertirse, por lo tanto hay un retroceso en los municipios”, advirtió Lindo.
El municipalista señala que la situación es más difícil porque en este contexto de pandemia, hay más carencias y necesidades de financiamiento en las alcaldías.
“Pero además hay que ver que con la pandemia la situación empeora porque la actividad económica se desaceleró y los municipios no tienen oportunidad de apoyar a la población por falta de recursos”, sostuvo.
Las municipalidades tienen tres fuentes de ingresos: las transferencias del Estado, los fondos propios y la cooperación externa, pero desde la crisis del 2018 los ingresos por las tres vías han caído.
Lindo también hizo hincapié que siguen siendo las más afectadas las alcaldías opositoras y las más pobres, porque son a las que se les da menos dinero y los desembolsos son más demorados.
Por su parte el economista Leonardo Labarca señala que el gobierno no debió reducirles el presupuesto a las municipalidades, puesto que los ingresos tributarios con la reforma fiscal en el 2019 crecieron.
“No tiene sentido por qué les hayan quitado recursos si al final con la reforma tributaria aumentaron los ingresos, esto afecta fuertemente a las alcaldías, les afecta su autonomía, hay menor inversión, proyectos de los que tenían planificado para largo plazo se ven interrumpido”, dijo Labarca.
Ejecución presupuestaria hasta junio del 2020
Hasta junio se ha transferido a las municipalidades un 59.8 por ciento, y aunque pareciera una ejecución eficiente la realidad es que este año todas han tenido que ceñirse la faja para ajustarse a su reducido presupuesto.
En total para este año se tiene previsto que las alcaldías, mayoría de las cuales dependen de estos recursos estatales, reciban en su conjunto para invertir en los municipios 2,941.9 millones de córdobas, y hasta junio les han transferido 1,759 millones de córdobas. Es decir pronto quedarán sin fondos para invertir en la segunda mitad del año. Cabe destacar que el presupuesto de este año es menos de la mitad de lo que se recibió en el 2018. (Ver infografía)
Este año en promedio a cada alcaldía se le transfirió 11.49 millones de córdobas en seis meses este año (1.9 millones de córdobas al mes), que si se compara con el año pasado es ligeramente mayor.
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Según el informe, estos pocos recursos desembolsados fueron destinados principalmente a infraestructura vial, construcción y rehabilitación de instalaciones deportivas, centros escolares y de salud, obras y servicios comunitario, entre otras cosas.
Menos dinero para gasto corriente
En cuanto al gasto corriente, el reporte oficial señala que se ejecutó el 46.7 por ciento, lo que significó una transferencia de 447.7 millones de córdobas, inferior a lo que se entregó el año pasado en igual periodo.
El gasto corriente se suele utilizar para cubrir gastos administrativos y de servicios, entre otras cosas. Y al reducirse significa que algunas municipalidades han tenido que recortar personal y algunos servicios.