Con el ingreso de la onda tropical número 31 al territorio nicaragüense, y tras el paso de la depresión tropical numero 14 el fin de semana pasado, las lluvias podrían extenderse para los próximos días, de leves a moderadas y principalmente en las zonas del Caribe y Pacífico del país, como consecuencia de una formación ciclónica entre Nicaragua y Costa Rica, explicó a LA PRENSA el agrometeorólogo del Centro Humboldt, Agustín Moreira
«De aquí al fin de semana tenemos posibilidades de lluvias que van a ir incrementando, generando unas condiciones un poco difíciles en relación a inundaciones que puedan presentarse en las zonas del centro de Nicaragua como también en la zona del litoral del pacífico. El resto de esta semana e inicios de mes, en el pacífico se van a estar generando algunas condiciones (lluviosas) por la secuencia del efecto del periodo lluvioso de este ciclo (de fin de semana pasado)», explicó Moreira.
El especialista señaló que las lluvias presentadas a partir de la tarde del martes 25 de agosto, podrían provocar inundaciones y crecidas de ríos, precisamente en la zona de Matagalpa, Ocotal y Jinotega, «zonas donde se debe de tener más cuidado, porque puede afectar desde la parte más alta de la sierra hacia las partes más bajas».
Por su parte el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) informó sobre «el segundo periodo lluvioso» que dio inicio el lunes 24 de agosto y advirtió que habrá más precipitación entre los meses de septiembre y octubre. Ineter destacó que a lo largo de la semana habrá nubosidad en horas de la mañana, bajas presiones en el día y lluvias dispersas «con carácter ligero».
La capital sigue siendo vulnerable
El agrometeorólogo señaló que Managua continúa siendo vulnerable en el periodo lluvioso, puesto a que el sistema de drenaje pluvial es obsoleto, «lo que provoca crecidas de los cauces, principalmente por la acumulación de basura», lo que seguidamente ocasiona inundaciones en las principales vías, viviendas y hasta derrumbe de árboles.
Con respecto a las descargas eléctricas, que desde junio hasta la fecha han provocado que al menos cuatro personas pierdan la vida, Moreira advirtió que hay un alto riesgo de que persista esta condición, por lo que llama a tener cuenta que estos eventos son «muy peligrosos, que pueden tener efectos lamentables como la persona que lamentablemente murió en León mientras estaba lavando y recibió la descarga eléctrica”.
El especialista recordó que septiembre es el mes de mayor incidencia en el periodo lluvioso, que estaría provocando algunas posibles formaciones ciclónicas que impactarían en la parte del Atlántico hacia el Caribe, por lo que llama a estar alertas, «La mayoría del territorio tiene que tener precaución», señala.