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Exastro de los Yanquis, David Cone, elogia material de Jonathan Loáisiga

Jonathan Loáisiga fue un lanzador más consistente, con un más claridad en su dominio y sus disparos fueron más rápidos que en pasado

El pasado viernes, mientras Jonathan Loáisiga abanicaba con un cambio de velocidad a 89 millas a Lewis Brinson de los Marlins, David Cone, el exabridor estelar de los Yanquis y comentarista de la Cadena YES, no escondió su entusiasmo por lo que vio.

“Un gran cambio ahí. Loáisiga no necesita aprender más lanzamientos, solo necesita ejecutar bien los que tiene”, dijo Cone, mientras el nica le colgaba dos ceros al equipo de Miami.

De esa forma, Jonathan le puso punto final a una temporada en la que mostró un visible progreso, mientras se convertía en un relevista de confianza para los Yanquis de frente a los playoffs.

El nica cerró la campaña con marca de 3-0 y 3.52 tras actuar en 12 partidos, en los que acumuló 23 innings con 21 hits, 11 carreras, nueve de ellas limpias, con siete bases y 22 ponches propinados.

Su mejoría es clara respecto a las dos temporadas anteriores en las que tuvo 2-0 y 5.11 (2018) y 2-2 y 4.55 (2019), mientras mostraba un control preciso y los contrarios le bateaban menos.

En el 2018, Loáisiga lanzó 24.2 innings en los que permitió 26 hits y regaló 12 bases para un whip de 1.54 y le batearon .271, mientras utilizaba 499 lanzamientos en ese recorrido.

Este año, lanzó 1.2 inning menos (23) que en el 2018 y para ello empleó 394 envíos, es decir, 105 menos que hace dos años, mientras le bateaban .241 con 1.22 de whip.

También este año lanzó más duro que en el pasado. Su recta de cuatro costuras tuvo average de 97.3 millas, mejor el promedio de 97.1 del 2019 y el 96.1 del 2018 y agregó el sinker.

Vea si eso es importante: a los lanzadores de rectas entre 90-92 millas, les batearon .262/.470 en average y slugging este año. A los de 92-94 millas: .258/.476 y a los de 94 en adelante: .234/.419.

A la recta de cuatro costuras del nica, los contrarios le batearon .177 y al cambio .105, pero necesita ajustar el sinker, atacado con .303 (33-10) y la curva con .308 (13-4) en esta temporada.

“Loáisiga tiene una recta ultra rápida con movimiento menos natural que el típico. Su sinker es también veloz y produce muchas rolas, igual su curva, extremadamente rápida”, dice Fangraphs.

De modo que como piensa David Cone, el material está ahí y Loáisiga ha comenzado a demostrar que sabe usarlo, mientras se prepara la postemporada con los Yanquis a partir de mañana.

La evolución es clara y con los días se ha visto también el carácter que posee el nica, lo que le ha permitido ser de grupo de relevistas confiables del mánager Aaron Boone esta temporada.

Loáisiga no es una obra terminada, pero es claro el ascenso que ha experimentado. Ahora vienen los playoffs, donde tiene 3.38 en cuatro juegos y 2.2 episodios laborados.

Edgard Rodríguez está en Twitter: @EdgardR 

 

Deportes Jonathan Loáisiga Yanquis de Nueva York archivo

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