Tras la evacuación de familias de la Costa Caribe de Nicaragua a albergues, como medida de seguridad ante el impacto del huracán ETA categoría uno, la epidemia del Covid-19 podría tomar ventaja sobre esa población y aumentar los riesgos de contagio, así como los casos de malaria, dengue y enfermedades respiratorias y gastrointestinales.
Ante este escenario, el Comité Científico Multidisciplinario brindó una serie de recomendaciones individuales, familiares y de las personas que están en albergues.
“En nuestro país continúan dándose casos de Covid-19, y en esta época del año suelen aumentar los casos de malaria, dengue y enfermedades respiratorias y gastrointestinales. Todo tipo de aglomeración o grupo de gente se convierte en un espacio de alto riesgo para contagiarse y enfermarse del Covid-19, debido a que existe mayor riesgo de coronavirus”, expone el Comité en un comunicado.
Es por ello que el grupo multidisciplinario brinda las siguientes recomendaciones.
Individuales
1-Mantener la distancia física de dos metros o tres brazos de distancia entre cada persona en todo momento.
2-Evitar tocar ojos, nariz y boca “porque es la entrada del virus”.
3-Lavar las manos con agua y jabón por 40 segundos.
4-Utilizar mascarilla de tela de tres capas, especialmente si estamos en un albergue. Tratar de tener tres mascarillas para cambiar si esta humedece.
5-Usar careta o protectora facial. “Recordemos que estas dos últimas (medidas) son barreras contra el virus y pueden ser lavadas con agua y jabón para ser reutilizadas.
A nivel familiar
– Cumplir con las medidas antes señaladas.
-Ante la llegada de las lluvias y posibles inundaciones, reconozca su riesgo y muévase hacia lugares de mayor altura.
-Mantener sus utensilios de cocina, comedor y trastes tapados y lavar con agua y jabón cualquier lata o plástico, recordando que el orín de ratas -que suben cuando va a ocurrir inundaciones- transmite la leptospirosis.
-Mantener un kit de emergencia, guardar medicamentos y documentos legales en una bolsa plástica. Debe agregar al menos tres mascarillas por persona, caretas y alcohol.
-Almacene agua limpia en recipientes con tapa, calcule 15 litros por persona, esto le permitirá mantener la higiene y tomar agua.
-Para tomar agua segura, agregue a 1 litro de agua, una gota de cloro al 5% o dos gotas de cloro al 3%, déjele reposar por 30 minutos y ya está lista para tomarla. Si el agua la observa turbia debe colarla con una tela de camisa limpia y luego aplicar el cloro.
-Tenga jabón suficiente.
-Si las autoridades nacionales de emergencia le plantean evacuar, no lo dude. Tome sus documentos, medicinas y lo esencial. Priorice la vida sobre los bienes.
En albergues
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- Siga las medidas señaladas anteriormente y las orientaciones de los encargados de los albergues.
- Asegúrese que su familia esté tres metros separada de la otra familia.
- Mantenga puesta su mascarilla y careta todo el tiempo.
- Alerte al coordinador del albergue cualquier situación sospechosa de salud.
- Preferiblemente las embarazadas y personas mayores de 60 años deberían tomar medidas más estrictas para la prevención y mantenerse alejada lo más posible de las demás personas.
- Aproveche cualquier camisa que no use para hacer mascarillas de tres capas, haga un rectángulo de 25 cm de largo x 15 cm de ancho y póngale tiras para que lo amarre.
- Para hacer careta facial, utilice cualquier botella de plástico de 2 o 3 litros, corte las puntas y el tubo que le queda, córtelo a la mitad de manera vertical, hágale dos hoyos y le pone dos tiras de amarre. Puede ponerle un pañuelo o tela para que no le quede tan pegado a la frente.
Aumento de casos de enfermedades puede agravar la situación
La médico y salubrista Josefina Bonilla, miembro del Comité, señaló que la alerta roja en la Costa Caribe Norte no solo por el impacto del huracán, sino porque también son zonas con municipios de pobreza severa y no existen presupuestos robustos ni programas y proyectos de desarrollo que aceleren su progreso como región.
“Los servicios de salud, en sus recursos materiales, financieros y sobre todo humanos, se han debilitado frente a la misma pandemia de la Covid-19 y más aún que son municipios con presencia mayor de malaria y otras enfermedades, en comparación con otras zonas del país. Es urgente la atención no solo en el momento del huracán sino en los meses y años venideros para atender con verdadera prioridad, las necesidades de la población y su desarrollo integral, salud, educación, economía y protección social”, expresó la doctora Bonilla.
La especialista en salud agregó que esa extrema vulnerabilidad en la que viven la población de esa zona se verá agravada con los efectos de Eta durante y después de su impacto, por lo que hizo un llamado a darle la debida atención de proteger a la población en su salud mental y física.
“Frente a la constante escasez en la vida de los pobladores, tanto de alimentos, como medicamentos y otros recursos, se aumenta los riesgos para la salud mental, por la incertidumbre, el miedo y la pérdida de condiciones de vida, desplazamientos, acercamiento de humanos de otras zonas (que pueden traer consigo el coronavirus)”, dijo la salubrista.
La doctora Bonilla señaló que tanto las instancias gubernamentales y no gubernamentales, y la cooperación externa que trabajan en esas regiones norte deben coordinarse para aprovechar al máximo los recursos que puedan ponerse a disposición; y mantener un monitoreo del comportamiento de las enfermedades, necesidades y presentar propuestas de proyectos y obtener recursos para hacerlos llegar a los protagonistas locales.