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Enatrel acumula deudas millonarias con Caruna, Bancorp y el INSS. Estos son los sorprendentes hallazgos de una auditoría

Al 31 de diciembre del 2019, Enatrel tenía una deuda de 154.96 millones de córdobas con el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) y con el Instituto de Seguridad Social y Desarrollo Humano (ISSDHU).

La Empresa Nacional de Transmisión Eléctrica (Enatrel), que recientemente asumió el control de la empresa distribuidora de energía Disnorte-Dissur, tiene una deuda de 154.96 millones de córdobas con el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) y con el Instituto de Seguridad Social y Desarrollo Humano (ISSDHU) por la adquisición del 51 por ciento de las acciones de la inmobiliaria Vista Development SA, reveló una auditoría.

Según un informe de auditoría correspondiente a 2019, elaborado por la firma BDO Nicaragua y aprobado en julio del corriente año por el Consejo Superior de la Contraloría General de la República (CGR), Enatrel adquirió está deuda en el 2012.

La inmobiliaria adquirida por Enatrel es dueña de un edificio moderno donde actualmente opera Enatrel y el Ministerio de Energías y Minas (MEM), el cual tiene una construcción de 22 mil metros cuadrados, lo que incluye una torre bancaria, dos penthouses y parqueo para 367 vehículos. Dicho edificio está localizado junto a la pista que une la rotonda de la Centroamérica y el colegio La Salle, una de las avenidas más concurridas de la capital.

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“Al 31 de diciembre de 2019 el saldo de 154,964,963 córdobas, corresponde a préstamo contratado con el Instituto de Seguridad Social y Desarrollo Humano (ISSDHU) con fecha 30 de noviembre de 2012 hasta por un monto original de 4,579,600 dólares para la adquisición del 51 por ciento de las acciones pertenecientes al ISSDHU en la sociedad Vista Development, S. A., el cual será cancelado en dólares estadounidenses mediante cuarenta cuotas trimestrales por el importe de 156,598 dólares cada una”, revela la auditoría.

La contratación del préstamo fue por un plazo de 10 años desde la suscripción del contrato, es decir, este debería vencerse en el 2022.

Este fue suscrito con una tasa de interés anual del 6.5 por ciento sobre saldo, “y se reconocerá un interés moratorio del 3.25 por ciento aplicado sobre las cuotas vencidas, se encuentra garantizado con la pignoración de las acciones adquiridas a favor del ISSDHU y garantía hipotecaria en segundo grado sobre edificio de Vista Development, S. A.”, detalla la auditoría.

Deuda en contingencia

Entre las contingencias (en contabilidad una contingencia es una incertidumbre) de la empresa se encuentra esta deuda, puesto que Enatrel ha incumplido con 12 cuotas.

“Al 31 de diciembre de 2019, Enatrel no ha cumplido con el pago consecutivo de doce cuotas por cuenta de adquisición del 51 por ciento de las acciones de Vista Development, S. A., según lo establecido en el contrato Venta de Acciones al Crédito con Garantía Prendaria e Hipoteca de Segundo Grado suscrito el 30 de noviembre de 2012. Conforme a este contrato el Instituto podría reclamar a Enatrel la devolución de las acciones y los derechos que se deriven por el incumplimiento de los pagos”, indica el registro contable.

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De hecho, el mismo contrato de préstamo señala que ambas instituciones podrán reclamar la devolución de las acciones en caso de falta de pago por parte de Enatrel de tres cuotas consecutivas y hasta el 2019 llevaban 12 cuotas retrasadas.

El economista Róger Arteaga manifestó que cuando una deuda está en contingencia significa dos cosas: puede ser perdonada y cobrada en cualquier momento.

“Cuando pasa una cuenta a contingencia, significa que puede ser o no que le perdonen la deuda real, es algo en espera, en suspenso, es como una cuenta transitoria en contabilidad, que no es un pasivo que no está cargando los estados financieros como deuda”, explica Arteaga, quien considera que posiblemente no sea cobrada.

La situación del INSS

Cabe destacar que actualmente las finanzas del INSS se encuentran deterioradas, al punto que el régimen espera que el próximo año el instituto termine con un déficit global por 8,050 millones de córdobas (equivalentes a unos 229.1 millones de dólares), una estimación que solo se había hecho antes de la reforma a la seguridad social que se aplicó el año pasado para supuestamente evitar la debacle de la institución.

El problema del INSS surge de varios factores: la fuga de afiliados que se ha originado desde el 2018, el creciente número de pensionados, los gastos administrativos y las malas inversiones del pasado, dinero que no se ha podido recuperar.

“Yo siempre he insistido que el problema del INSS no es que no hay cotizantes, no es que aumenten los pensionados, sino la mala administración, esto solo es una prueba más de por qué esta institución está en déficit”, dijo Arteaga.

Otras deudas millonarias de Enatrel

Además, Enatrel tiene otras deudas pendientes que pesan en los estados financieros. La entidad estatal está endeudada con la cooperativa Caja Rural Nacional (Caruna) desde el 31 de diciembre del 2016, con 89.26 millones de dólares en préstamos con esta financiera que ha canalizado de forma discrecional.

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La auditoría revela que este préstamo fue con una tasa de interés corriente del 8 por ciento anual sobre saldo y un interés moratorio del 50 por ciento de la tasa de interés corriente, pagadero en 10 cuotas de 379.14 millones de córdobas, equivalentes a 13.30 millones de dólares, con un plazo de duración de 10 años calendario con vencimiento el 31 de mayo de 2026. Este préstamo fue usado para la ampliación de la red eléctrica, según explica el documento.

Asimismo, la empresa tiene dos deudas con la entidad financiera sancionada Bancorp. La primera deuda es por 31.72 millones de dólares “para desarrollar principalmente el Proyecto Redes Eficientes y Sostenibles y el Programa Apoyo a la Industria Eléctrica; con vencimiento final en agosto de 2026, devengan tasas de interés entre el 6.5 por ciento y 10.2 por ciento, y se encuentran garantizados con firma de pagarés suscritos entre las partes”, detalla el documento.

La segunda deuda con Bancorp es por un monto de 10 millones de dólares, “corresponde a pagaré a la orden, suscrito entre la Empresa Nacional de Transmisión Eléctrica (Enatrel) y Banco Corporativo, S. A. (Bancorp), suscrito el 12 de diciembre de 2018 por importe original de US$10,000,000, otorgado a través de un solo desembolso para ser utilizado en el Proyecto Redes Eficientes y Sostenibles Agencias DOSA en el triángulo minero de la Costa Caribe, con un plazo de 10 años contados a partir de la fecha de firma del pagaré, devenga tasa de interés del 10.2 por ciento anual sobre el saldo”.

En abril del 2019, Bancorp fue sancionado por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, pese a que un mes antes fue comprado por el Estado por 23 millones de dólares y se convirtió en un banco nacional.

Además, Enatrel hasta el 31 de diciembre del 2019 mantenía una cuenta por pagar a la Empresa Propietaria de la Red (EPR), que opera el Sistema de Interconexión Eléctrica de los Países de América Central (Siepac) por 53 millones de córdobas “por cuenta de principal e intereses del préstamo para la construcción del activo denominado: Infraestructura General de la Línea SIEPAC entre las subestaciones de Sandino y Masaya”, indica el documento.

El economista y sociólogo Óscar René Vargas señala que la acumulación de deudas de Enatrel, más la nueva obligación que tiene con la empresa distribuidora de energía, podrían afectar aún más sus finanzas.

“Es una bomba de tiempo, porque Enatrel ya tiene varias obligaciones financieras y asumir una empresa con déficit implica mayor riesgo y responsabilidad”, dijo Vargas.

Enatrel asume distribución de energía

Con la Ley de Aseguramiento Soberano y Garantía del Suministro de la Energía Eléctrica a la Población Nicaragüense, que recientemente se aprobó, la dictadura de Daniel Ortega también ordena que la Empresa Nacional de Transmisión Eléctrica (Enatrel) asuma parte de las funciones de la distribución de energía eléctrica, ya que pasará a controlar parte del sistema operativo de Disnorte y Dissur.

En su momento el analista político y abogado Eliseo Núñez señaló que habría “un conflicto de intereses” en el momento en que Enatrel asumiera la responsabilidad de asegurar de que Disnorte-Dissur mantenga el suministro de energía a la población, debido a que jugará dos roles: la encargada de asegurar el transporte de la energía eléctrica de las generadoras y además ser parte del negocio de la distribución.

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