El inicio de cada año supone una mayor presión financiera para la población y las empresas, puesto que en los primeros tres meses se tiene que pagar los impuestos anuales y algunos de estos se han encarecido porque incluyen requisitos que antes no se pedían.
A inicios de año se debe renovar matrícula para aquellas personas que tienen negocios, sticker rodamiento si tienes un vehículo, además del impuesto de Bienes Inmuebles y la liquidación del Impuesto sobre la Renta, el cual antes tenía como fecha límite el 31 de marzo y ahora es hasta finales de febrero. A estos se suman los impuestos mensuales.
El exdirector de la Dirección General de Ingresos (DGI), Róger Arteaga manifestó que cada año se vuelve más agresiva la recaudación, al punto de darle persecución a los contribuyentes en mora y todo esto se debe a la sed recaudatoria del régimen, que desde la crisis del 2018 se le hace más difícil conseguir financiamiento externo, con excepción del 2020, que a finales de ese año pudo liberar recursos para afrontar la pandemia y los daños de los huracanes Iota y Eta.
Arteaga señala que los contribuyentes están asfixiados, sin embargo para evitar cualquier conflicto legal tratan de cumplir con las altas exigencias fiscales del régimen.
Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)
Primero debe saber que el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), está contenido y fundamentado en el Decreto 3-95. Este impuesto se debe pagar los primeros seis meses del año a las alcaldías y es de carácter obligatorio. Este se aplica sobre el valor de terrenos y construcciones fijas, plantaciones estables o permanentes (café, caña) construcciones e instalaciones fijas, maquinarias fijas, según detalla la Alcaldía de Managua en su sitio web.
Según el decreto “los contribuyentes que cancelen el IBI en un solo pago, durante el primer trimestre del año, son acreedores de un descuento del 10 por ciento del impuesto a pagar”. Los contribuyentes tiene hasta junio para cancelar este obligación y los que incumplan deberán pagar una multa equivalente al 10 por ciento del valor del inmueble.
Las alcaldías permiten que este impuesto se pague en dos cuotas iguales. La primera correspondiente a 50 por ciento de la obligación en enero, marzo y abril y el otro 50 por ciento a más tardar el 30 de junio. Pero los que paguen en los primeros tres meses reciben un alivio del 10 por ciento sobre el monto a pagar.
Debe saber que “están exentos del IBI, los jubilados por la casa en que habitan, siempre que la persona jubilada o su cónyuge o compañero en unión de hecho estable, sea propietario o usufructuario del bien inmueble”. En este sentido, la alcaldía explica que estas personas deben presentar el carné de jubilación y su fotocopia, más una carta del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social que dice a partir de qué fecha goza con el beneficio de jubilación, para tener derecho a la exención por casa de habitación.
Si el jubilado posee más de dos propiedades, la exención se aplica en la propiedad donde el habita, teniendo que pagar el impuesto de las demás propiedades. Este trámite se hace solamente en la ALMA central, es decir no se puede realizar en cualquier otra sucursal municipal.
También están exoneradas las viviendas que sean de interés social, siempre y cuando haya algo que soporte dicha información. Eso sí, se recomienda a los dueños de este tipo de propiedades presentarse a las alcaldías a notificar que la misma es de interés social.
El concejal del partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), Sellin Figueroa advirtió que este impuesto ha venido incrementando porque se le ha dado persecución judicial a quienes no cancela el adeudo o no se presente a firmar un arreglo de pago, de tal manera que las personas se han puesto al día.
En el 2019 la Dirección General de Recaudación logró 291 millones de córdobas en ingresos en concepto de IBI, reportando un incremento de 70 millones en comparación con el 2018, periodo en que este tributo llegó a 221 millones.
Debe saber que estar al día con este impuesto es clave, al momento de que se proceda a vender una propiedad, para que el nuevo dueño la inscriba, se pide este requisito.
Puede interesarle:La última mentira de la Alcaldía de Managua podría afectarle a los contribuyentes en 2021 y 2022
Impuesto de Matrícula
Otro impuesto a pagar es el de matrícula con base en el Plan de Arbitrios de Managua. Está obligada toda persona natural o jurídica que en la circunscripción del municipio de Managua se dedique a la venta de bienes, industriales o prestación de servicios proporcionados por profesionales o no profesionales. Este impuesto debe pagarse en enero.
Para este trámite el único requisito es que la persona dueña del mismo se encuentre solvente con la municipalidad, lo es comprobado en los registros. Este año la Alcaldía de Managua pretendía exigir constancia de los socios emitida por el registro mercantil, constancia de urbanismo y aval ambiental, pero desistió de la nueva medida, informó Carmen Hilleprandt, presidenta de la Cámara de Comercio y Servicio de Nicaragua (CCSN).
El concejal Figueroa manifestó que este año dentro de este mismo impuesto se va a cobrar rótulo, a quienes tengan y un aval ambiental, este último requerimiento tiene año de aplicarse.
El año pasado en concepto de matrícula y licencia, la Alcaldía de Managua esperaba una recaudación de 496 millones de córdobas, pero se desconoce si esa proyección se cumplió. Este año la proyección es captar unos 504.4 millones de córdobas por este impuesto.
¿Cómo se determina este impuesto? Según el artículo 5 de Decreto Ejecutivo 455, aprobado el 5 de julio de 1989, se aplica de la siguiente forma: Se paga 2 por ciento sobre el promedio mensual de ingresos brutos del negocio obtenido en los últimos tres meses del año anterior.
En caso de que el negocio tenga menos de tres meses, se aplica la misma tasa sobre el promedio de los ingresos brutos del negocio desde su creación.
Y si se trata del inicio de una nueva actividad, negocio o establecimiento, se abonará como matrícula un uno por ciento de capital invertido y no gravado por otro impuesto municipal. Es decir si en enero usted decide abrir un negocio y aún no ha generado ingresos, entonces su matrícula se le calculará sobre la inversión.
Sticker de Rodamiento
Otra obligación es el pago del sticker o calcomanía de rodamiento, una obligación que deben cumplir todos los propietarios de vehículos (de cualquier tipo), y se debe proceder en los primeros tres meses de cada año. La fecha tope es el 31 de marzo para evitar una multa de tránsito y por otro lado para incentivar la inversión en la red vial.
El sticker es un impuesto municipal que está regido en la Ley 856, que regula el régimen de circulación vehicular a nivel nacional y establece 13 categorías vehiculares.
Lea también:Voracidad de la recaudación en Managua con el IBI y tasa por basura se refleja en informe 2019
Las tarifas se mantienen. Por ejemplo una motocicleta paga 50 córdobas, un tractor agrícola 75 córdobas, lo carros particulares pagan 100 córdobas, taxis 125 córdobas, microbuses 150 córdobas, remolques mayor a los dos ejes 250 córdobas, bus de uso comercial 300 córdobas, montacargas 500 córdobas, camiones menores de siete toneladas de capacidad 400 córdobas, cabezales 600 córdobas, grúas cisternas, compactadoras y otros equipos pesados para la construcción 800 córdobas y camiones mayores a las 12 toneladas 1,000 córdobas.
La ley N°. 856 Ley de Reformas y Adiciones a la Ley N°. 431, “Ley Para el Régimen de Circulación Vehicular e Infracciones de Tránsito” en su artículo 11 señala que los jubilados están exentos de pagar el impuesto de rodamiento.
Además de los impuestos que se pagan anual, hay mensuales que se suman a los gastos que se hacen a inicios de año, por ejemplo el impuesto de basura, Impuesto Mensual de Ingresos (IMI) y Commema.
Liquidación del Impuesto sobre la Renta (IR)
Pero además las empresas deben prepararse para la liquidación del Impuesto sobre la Renta, que en la reforma tributaria que aplicó el régimen de Daniel Ortega a inicios del 2019, se decidió adelantar las fechas de declaraciones y pago de los impuestos, lo que ha generado afectaciones entre las empresas.
Antes de la reforma fiscal el plazo para declarar el IR anual era el 31 de marzo, ahora es hasta el 28 de febrero, lo que pone presión a las empresas que desde diciembre vienen trabajando para rendir en tiempo y forma y evitarse una multa.
Al respecto Hilleprandt señaló que esto tiene presionada a las empresas puesto “al cierre de la liquidación prácticamente terminan pagando no un 30 por ciento, sino un 70 por ciento, al final ahí se va la rentabilidad y la liquidez y eso es fatal porque eso ha provocado un rezago en la inversión”.