En medio de la dura crisis financiera que enfrenta el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), los esfuerzos por incrementar la planilla de afiliados activos parecen ser insuficientes, puesto que aún no se ha logrado llegar a los niveles que tenía antes de la pandemia. En el 2020, tomando como referencia febrero, previo al Covid-19, el INSS perdió 19,404 afiliados.
Según las estadísticas oficiales, entre diciembre de 2020 y diciembre de 2017, el INSS acumula una pérdida de 190,990 empleados.
En el primer mes de este año, el INSS captó 13,545 nuevos afiliados con respecto a diciembre de 2020, cuando la institución cerró con 723,206 asegurados, estando por debajo del 2015 —según cifras del Banco Central de Nicaragua (BCN)—.
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En enero los registros administrativos del INSS reportaron 736,751 afiliados, cifra superior en 0.36 por ciento con respecto a los 734,093 reportados en enero del año pasado, detalla el informe de evolución de estadísticas del mercado laboral enero de 2021 publicado por el BCN.
Y aunque en enero se logró captar 13,545 afiliados, aún hacen falta 5,859 trabajadores para recuperar los 19,404 inscritos que se perdieron como consecuencia de la crisis sanitaria.
¿Podrá el INSS mantener el ritmo de afiliación?
Donald Soza, exfuncionario del INSS y asesor independiente en seguridad social, expresó que aún manteniendo este ritmo de crecimiento no se lograría recuperar todos los afiliados perdidos desde la crisis política.
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“Si hacemos una multiplicación de 13,000 por 12 meses, te va a dar 156,000 trabajadores, suponiendo de que al mismo ritmo de enero se llegue a diciembre, pero cuántos afiliados se perdieron, fueron 200,000, es decir, que aún no se lograría recuperar, pero además sacamos este cálculo sin tomar en cuenta que es un año electoral y eso puede generar incertidumbre y por consiguiente puede subir a menor ritmo, yo creo que si llega a crecer, el número de afiliados este año estaría a nivel de la mitad de lo que se fue desde el 2018, eso si la política no llega a afectar la economía”, dijo Soza.
Añadió que para lograr llegar al nivel previo a la crisis política, se tendría que duplicar lo captado en enero, “y eso yo lo veo muy difícil”.
Qué sectores han recuperado más afiliados
De nueve sectores que registra el INSS, solo minas y canteras, electricidad, gas y agua y servicios comunales reporta una reducción de afiliados en el primer mes del año; el resto ganó asegurados.
El sector que reporta un mayor crecimiento es la industria manufacturera, que logró recuperar 7,738 afiliados, pasando de 153,277 en diciembre del año pasado a 160,415 en enero del corriente, un aumento de 4.6 por ciento.
El economista Róger Arteaga señala que si el crecimiento del número de afiliados al INSS se sustenta en el sector manufacturero, no es un crecimiento real, puesto que en los últimos meses las contrataciones han sido de corto plazo.
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“Primero, 13,000 no es mucho y además si más de la mitad fue en zona franca, no es seguro, porque en este tiempo se ha estado trabajando por periodos cortos. Claro que si este crecimiento fuera en comercio, construcción u otros sectores, nos daría aliciente, porque hay que buscar que sea permanente, que no sea como saltos de rana que brinca y cae, pero para eso se necesita un plan de reactivación económica”, sostuvo Arteaga.
El segundo sector que mostró una mejora fue agropecuario, silvicultura, caza y pesca, que en diciembre tenía 67,175 afiliados y en enero alcanzó los 74,881.
En tercer lugar se encuentra el sector comercio, que incluye a hoteles y restaurantes; es el que más ha sufrido pérdidas de empleos desde la crisis sociopolítica, por lo cual el aumento de enero aún es insuficiente. En diciembre el comercio tenía 104,410 asegurados y en enero llegó a 105,570.
No obstante, las estadísticas muestran que entre diciembre de 2017 y diciembre de 2020 el sector comercio registró 81,819 afiliados menos en ese periodo. Pasando de tener 186,229 afiliados a 104,410 trabajadores.
Afiliación en otros sectores
En el caso del sector construcción, ganó apenas 441 nuevos afiliados en enero; no obstante, este número es mucho mayor con respecto a lo reportado en enero del año pasado, cuando había 19,367 asegurados. Sin embargo, desde diciembre del 2017 hasta diciembre del 2020 este sector perdió 12,749 trabajadores.
Mientras que el sector financiero apenas logró captar 215 afiliados en enero, pasando de 67,713 a 67,927; sin embargo, eso fue insuficiente para poder llegar al nivel que se tenía en febrero, antes de la pandemia, cuando había 68,291 asegurados en el sector. Obviamente si se compara con respecto a los números que se tenían en diciembre del 2017, previo a la crisis, se logra ver el impacto, puesto que desde la fecha perdieron 19,309 empleos. Lo que va acorde a la caída pronunciada que ha tenido la intermediación financiera.