Médicos independientes demandaron al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ser incluidos de inmediato en el plan de vacunación para poder atender con seguridad a los pacientes con Covid-19. El personal de salud es el grupo que ha estado en la primera línea combativa del virus, por lo que su petición es parte de su derecho, expusieron.
«Demandamos al Minsa vacunar inmediatamente a todos los trabajadores del sector salud, público y privado: médicos, odontólogos, enfermeros, auxiliares de enfermería, técnicos quirúrgicos, técnicos de rayos x, sicoterapeutas, laboratoristas, otro personal de salud, camilleros, conductores, afanadores, conserjes, personal de seguridad y administrativo», exige la Asociación Médica Nicaragüense a través de un pronunciamiento.
A un año que se reportara el primer caso de Covid-19, el 18 de marzo de 2020 y con la llegada de las vacunas al país, los trabajadores sanitarios desconocen cuándo serán incluidos en el plan de inmunización.
Lea también: Un año de pandemia Covid-19 en Nicaragua: luto, desinformación y supervivencia
Los médicos aclararon que el llamado no es detener la inmunización en pacientes vulnerables sino «agilizar» este proceso y alcanzar al menor tiempo el mayor número de personas que estén entre los grupos prioritarios, a como lo ha establecido la Organización Mundial de la Salud, que incluye a pacientes con comorbilidades y trabajadores de la salud.
Contagios y muertes en el personal de salud
El grupo de especialistas sostiene que la falta de acción del régimen y la negligencia de no proveer equipos de protección personal a los trabajadores de la salud se ha visto reflejado en los contagios y muertes registradas entre este grupo durante este año de pandemia.
Aunque no hay un registro oficial, el Observatorio Ciudadano Covid-19 hasta el 13 de marzo reporta 884 trabajadores de la salud contagiados por el virus y lleva en su registro al menos 116 fallecimientos sospechosos del virus.
La vacunación inició el pasado 2 de marzo en pacientes con insuficiencia renal crónica que reciben tratamiento de hemodiálisis y aunque el Gobierno anunció que este 28 se completaría el esquema para este primer grupo con la aplicación de la segunda dosis, no especificó cuántos han sido cubiertos en esta primera fase. La vocera y primera dama designada, Rosario Murillo, solo anunció que en el segundo grupo estarán los pacientes oncológicos, cardiópatas y adultos mayores con hipertensión arterial. Los trabajadores de la salud siguen a la espera de ser notificados.
«Hoy por hoy, el personal médico y paramédico desconoce cuándo y en qué momento y dónde asistir para aplicarse la vacuna. Estas medidas son negativas para la población y el mismo personal médico, tanto privados como públicos, que atienden y están de cara y han ofrendado su vida en este desastre que ha hecho el Covid-19», dijo al respecto el doctor José Antonio Vásquez, presidente de la Unidad Médica Nicaragüense (UMN).
Lentitud de respuesta gubernamental
La UMN sostiene que las esperanzadoras noticias de la aprobación y llegada de las primeras vacunas al país se estrellaron con la «lentitud» de la respuesta gubernamental y la falta de un plan transparente de vacunación. En el país la vacunación arrancó sin que el Gobierno estableciera un plan oficial de inmunización.
«Aún se desconoce el porcentaje de vacunados para alcanzar la inmunidad colectiva, por lo tanto se debe aspirar a vacunar de forma universal, ya que mientras existan personas susceptibles de ser infectadas, el virus continuará reproduciéndose y creando nuevas variantes», alertó la UMN a través de un pronunciamiento.
Lea además: Minsa: Nicaragua registra 6,582 casos positivos de Covid-19 y 176 muertes
El doctor Vásquez, presidente de la UMN, señaló que aunque se sepa sobre la llegada de la vacuna, en la práctica aún no se ve el desarrollo o implementación de un programa de vacunación y por el contrario el Gobierno ha hecho proselitismo político con esta situación.
«La población es importante y el Gobierno está en la obligación de informar sobre las complicaciones, organigrama específico de dónde se debe de aplicar la vacuna», enfatizó el médico.
«Participación ciudadana»
El epidemiólogo Leonel Argüello, miembro del Comité Científico Multidisciplinario (CCM), refirió que para el proceso de inmunización es fundamental contar con la participación de la sociedad civil para cumplir exitosamente este plan y reducir la mortalidad por esta enfermedad que ha cobrado la vida de millones en el mundo.
«La participación comunitaria es lo que fortalece y garantiza qué acciones de salud inician las autoridades nacionales (…) Ambas partes deben consensuar que la vacunación es urgente, porque en esta etapa, lo que nos interesa es que no se mueran», dijo este jueves el especialista durante una ponencia sobre Roles y propuestas de la sociedad civil durante la vacunación contra la Covid.
El doctor Argüello manifestó que el papel de la sociedad civil dentro de los barrios, comunidades y departamentos ayudará a reforzar la campaña de educación que desarrolle el Ministerio de Salud. Sin embargo, la desinformación, el temor y desconfianza en torno a las vacunas está presente entre la población debido a que hasta ahora el régimen no ha presentado un esquema de vacunación.
Por su parte, la doctora Bernarda Nicaragua —originaria de Argentina, y quien participó de la ponencia— consideró que si el Gobierno actúa solo, «no podrá dar abasto» durante el proceso, y coincidió con el doctor Argüello de que la forma de garantizar el éxito es contar con la población.
Puede interesarle: Nicaragüenses ya pueden solicitar en línea la prueba PCR para Covid-19
«La sociedad civil demuestran que es capaz de emplear su tiempo y conocimientos para ofrecer soluciones, propuestas y salidas. Aceptar eso es parte de la democracia en cualquier país del mundo, y sobre todo cuando un país es pobre y tiene tantas dificultades. No puede haber plan de salud exitosa sin la participación comunitaria», enfatizó.
Sobre este punto, la UMN remarca que a un año de pandemia, la población no tiene acceso a ninguna información relacionada con la pandemia, y por el contrario el régimen continúa promoviendo aglomeraciones e ignorando las medidas básicas de prevención como el uso de mascarillas y distanciamiento físico.
«La población no puede realizarse libremente las pruebas de laboratorio para Covid, ni las pruebas de anticuerpo; no existen normas terapéuticas acordes con los avances de la literatura médica; no se diagnostican ni registran adecuadamente las atenciones ambulatorias, los egresos hospitalarios ni las defunciones», lamentó el organismo independiente.
Impulsar vacunación
El doctor Vásquez llama a las autoridades nacionales a desplegar las vacunas en todo el territorio nacional y satisfacer las necesidades de la población que lo requiere.
«Se necesita que todas estas vacunas que son donadas para el pueblo de Nicaragua lleguen de forma general, que no sean utilizadas para fines políticos, porque la población lo necesita, que lleguen a los diferentes territorios, ancianos y hombres de la salud. El Gobierno está en deuda con el pueblo de Nicaragua y con los que arriesgan su vida y esto es intolerable para un gobierno que se considera cristiano y socialista», dijo el médico.
A un año de haberse registrado el primer caso de Covid-19 en Nicaragua, el país contabiliza 6,582 contagios y 176 muertes por esta enfermedad, según datos oficiales del Minsa.
Las estadísticas gubernamentales contrastan con las que registra el Observatorio Ciudadano, que para médicos independientes están un poco más apegadas a la realidad de lo que se vive en el país. El organismo acumula 13,237 casos sospechosos desde que inició la crisis sanitaria en el país y un total de 3,002 decesos.